Poema: A Judith Hearne

Nota de la autora: El presente poema está inspirado en el personaje de la película La pasión solitaria de Judith Hearne, una película de 1987 que reseñé el día de ayer en este mismo blog. Si quieres leer la reseña, puedes hacer clic aquí.

Imagen editada con Canva. Fuente de la imagen: Pexels

La soledad te rodea;
tu vida no pudo ser más complicada
conforme te diste cuenta de que
quizás el matrimonio no era lo tuyo.

Luchaste contra tu depresión y
la seducción del alcohol;
te aferraste a Cristo como nunca,
como si Él te indicara el camino
hacia el amor verdadero.

Entraste a una casa donde
los lobos están vestidos
de ovejas inocentes;
uno de ellos te enamoró
con sus encantos.

Pensaste que él era devoto,
que era trabajador,
y que estaba interesado en ti,
mas no te imaginabas que su
interés era monetario.

Cuando caíste de nuevo en las garras
del alcohol, ese veneno etílico,
caíste en un espiral de autodestrucción,
buscando compasión en los lugares
equivocados y con la gente equivocada.

Al final, tras esa crisis,
tras esa oscuridad en el alma,
renaces al dejar ir lo
que para ti no era.

¿Qué sucedió después de que
tiraste la dirección de Jim?
Quiero pensar que finalmente
decidiste abrazar la soledad,
y que buscarías el modo
de renovarte.

Quiero pensar que ese nuevo comienzo
te llevará finalmente hacia una
sanación interna; que por fin
conozcas a alguien que te valore
por como eres.

Quiero imaginarme que ahora
eres feliz y plena, que
buscaste ayuda adecuada
y reiniciar desde cero.