Apoyando el arte y la cultura nacional | "Un fausto anda por la avenida" 🎭 ES|ENG

𝗘𝘀𝗽𝗮ñ𝗼𝗹

Me encanta el arte y la cultura, así como siempre que puedo apoyo el talento nacional. Hace poco tuve la dicha de ir a Puerto Teatro para ver una obra que me termino gustando mucho, "Un Fausto Anda por la Avenida". Este título intrigante no solo prometía una narrativa profunda, sino también una reflexión sobre los dilemas morales que enfrentamos en nuestras vidas.

Puerto Teatro siendo honestos no es un teatro con grandes instalaciones, hace falta ponerle más cariño, pero eso no quita el gran valor que le aportan las personas con el gran trabajo que hacen en todas sus actividades, para mí siempre es un gusto ir y en esta oportunidad no fue distinto. Al entrar a la función, el escenario, aunque no era el más asombroso, estaba acomodado de manera ideal, justo con lo necesario, su ambientación, sin ser ostentosa, transportaba al espectador a un entorno marcado por la esperanza y la decadencia. La trama, centrada en un hombre honesto que pierde su trabajo y se ve seducido por promesas de poder y éxito, mostró una realidad muy cruda.

El protagonista, interpretado de una manera muy genial por un actor cuya entrega era notoria, comenzó como un reflejo de muchos: trabajador, honrado y luchando por salir adelante. Sin embargo, conforme avanzaba la historia, la presión de las circunstancias y las voces tentadoras que lo rodeaban lo llevaron por un camino oscuro y autodestructivo. La metamorfosis de este hombre, fue representada de manera tan real que sentí cómo la tensión en la sala se intensificaba, pero al mismo tiempo, la trama tenía unos buenos toques de humor que hacían todo más ameno, hasta gracioso (el ángel y los demonios de verdad representaron bien sus papeles de conciencia).

Las voces malvadas que lo persuadían eran personificadas por otros actores que desempeñaban roles secundarios pero cruciales. Cada uno aportaba una dimensión diferente a la lucha interna del protagonista: la ambición, el deseo de cambiar y la traición a los valores fundamentales. Era como observar una batalla entre la luz y la oscuridad, encarnada en los dilemas morales de un solo hombre.

La obra no solo exploró la vulnerabilidad humana ante la adversidad, sino que también planteó preguntas profundas sobre la naturaleza del poder y la moralidad. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar para alcanzar nuestras metas?, ¿qué sacrificios estamos dispuestos a hacer? Estas interrogantes resonaron en mi mente mientras contemplaba cómo el personaje central, atrapado en un torbellino de decisiones erróneas, se enfrentaba a las consecuencias de sus acciones.

Al final de la representación, la sala se llenó de ovaciones, no éramos muchas personas, pero todos quedamos complacidos con la obra. Salir de Puerto Teatro esa noche fue como salir de un sueño, amó el teatro y siempre que voy siento que me transportó a otro mundo. La experiencia de presenciar "Un Fausto Anda por la Avenida" fue un recordatorio poderoso del poder transformador del teatro y su capacidad para hacernos reflexionar sobre los aspectos más profundos de nuestra existencia, así como conectar más con nuestra realidad y dejar de un lado la virtualidad.

Definitivamente, esta obra a dejo una buena impresión en mí, recordándome la fragilidad de la integridad humana y la importancia de mantenerse fiel a uno mismo en tiempos de adversidad. Si alguna vez tienen la oportunidad de presenciar esta obra o cualquier otra en Puerto Teatro, no duden en hacerlo. Este festival de autores fue en honor a varios autores venezolanos, pronto se viene el festival de teatro y créanme que ahí estaré.

𝗘𝗻𝗴𝗹𝗶𝘀𝗵

I love art and culture and whenever I can I support national talent. I recently had the joy of going to "Puerto Teatro" to see a play that I ended up really liking, "A Faust Walks down the Avenue". This intriguing title not only promised a profound narrative, but also a reflection on the moral dilemmas we face in our lives.

Puerto Teatro to be honest is not a theater with impressive facilities, it needs more "caring", but that does not diminish the great value that the people contribute with the excellent work they do in all of their activities, for me it's always a pleasure to go and this time was no different. Upon entering the show, the stage, although was not the most amazing, was nicely arranged, with just what was needed, its ambience, without being ostentatious, transported viewers to an environment marked by hope and decadence. The plot, centered on an honest man who loses his job and is seduced by promises of power and success, showed a very harsh reality.

The protagonist, played in a very cool way by an actor whose commitment was notorious, began as a reflection of many: hardworking, honest and struggling to get ahead. However, as the story progressed, the pressure of circumstances and the tempting voices around him led him down a dark and self-destructive path. The metamorphosis of this man, was portrayed so realistically that I felt the tension in the room intensify, but at the same time, the plot had some nice touches of humor that made everything more bearable (the angel and the demons really played their roles of conscience well).

The evil voices that persuaded him were personified by other actors who played secondary but crucial roles. Each brought a different dimension to the protagonist's inner struggle: ambition, the desire to change and the betrayal of fundamental values. It was like watching a battle between light and darkness, embodied in the moral dilemmas of a single man.

The play not only explored human vulnerability in the face of adversity, but also raised profound questions about the nature of power and morality: how far are we willing to go to achieve our goals, what sacrifices are we willing to make? These questions echoed in my mind as I watched the central character, caught in a whirlwind of wrong decisions, face the consequences of his actions and the consequences of his actions.

The play not only explored human vulnerability in the face of adversity, but also raised profound questions about the nature of power and morality: How far are we willing to go to achieve our goals?, what sacrifices are we willing to make? These questions echoed in my mind as I watched the central character, caught in a whirlwind of wrong decisions, face the consequences of his actions.

At the end of the performance, the room was filled with cheers, we were not many people, but we were all pleased with the play. Leaving Puerto Teatro that night was like coming out of a dream, I loved going to the theater and every time I go I feel like I'm transported to another world. The experience of witnessing "A Faust Walks down the Avenue" was a powerful reminder of the transformative power of theater and its ability to make us reflect on the deepest aspects of our existence, as well as connect more with our reality and leave virtuality aside.

This play definitely left a good impression on me, reminding me of the fragility of human integrity and the importance of staying true to oneself in times of adversity. If you ever have the opportunity to see this play or any other at Puerto Teatro, do not hesitate to do so. This festival of authors was in honor of several Venezuelan authors, the upcoming theater festival is approaching and believe me I will be there.