Mi entrada al concurso TopFiveFamily Observa Piensa Escribe - “El dolor que no le deseo a nadie”

Hola estimada comunidad, aquí les dejo mi participación en el concurso semanal.

Imagen propiedad @lanzjoseg

Durante mi adolescencia, repentinamente cuando tomaba algo frio (agua, jugo, helado, refresco), me daba una molestia en una muela, era un dolor suave y una sensación que no puedo describir, yo le tenía pánico al odontólogo, y por esa razón no le avisaba nada a mi amada madre, la solución que encontré fue fácil y sencilla, no ingerir nada frío.

Al pasar el tiempo, repentinamente me comenzó un dolor de muela que no se me quitaba con pastillas, no era un dolor intenso, me dolía parte de la cara y el oído, lo que mas me preocupaba era que ese dolor estaba permanente y me desconcentraba, no podía estudiar, se me cambiaba el ánimo, no quería ni hablar. En vista que estaba en exámenes trimestrales, no me quedo otra alternativa que comentarle a mi madre, ella me dijo “un dolor de muelas no se le desea ni al peor de los enemigos” , e inmediatamente , llamo al trabajo para avisar que no asistiría y me llevo al EMERGENCIAS del IPASME.

Pixabay-pololofreack30

Primera vez en mi vida que tuve el deseo de ver a un odontólogo para que terminara con mi sufrimiento. Tuvimos que esperar en el consultorio 3 horas para ser atendida. Y no me pudieron hacer nada ese día lunes, porque necesitaban una radiografía para darme el diagnostico. Sali del consultorio con mi dolor de muela y la orden para que me hicieran el RX.

El día martes , fuimos al laboratorio de RX, había muchos pacientes y esperamos alrededor de 4 horas para ser atendida, ya no nos daba tiempo de llegar al odontólogo porque trabajaba medio día, (otro día más de sufrimiento).

El día miércoles llegamos tempranito al consultorio , fui la paciente número 1, el odontólogo me explico que era una caries, comenzó a taladrar y a usar sus implementos, me coloco una pasta mentolada, y como por arte de magia, el dolor desapareció, sentí que regresé a la vida. Él me advirtió que esa pasta era curativa y temporal, que tenía que volver a la consulta para sacarla y colocar un cemento definitivo. En ese momento perdí el pánico al odontólogo y comencé a tener mis citas anuales para prevenir y no volver a sufrir ese dolor indescriptible, que no se lo deseo a ninguna persona.

Quieres participar en el concurso, entonces haz clip aquí, para leer las Reglas.

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