Esta es mi entrada al concurso @hispaliterario promovido por las comunidades Writing Club @hispaplus @celf.magazine @es-literatos

This is my entry to the @hispaliterario contest promoted by the Writing Club @hispaplus @celf.magazine @es-literatos communities

Haz bien sin mirar a quien

  Un tirano monarca descubrirá cuán noble puede ser su pueblo y la solidaridad humana cuando menos se los espera.

  El calor del verano aprieta con todas sus fuerzas, sofocando al poderoso hombre que viaja dentro de la diligencia en esta mañana de sol radiante y viento caliente lleno de polvo, que quema al roce con la piel igual que si el aire tuviera su origen en el mismísimo infierno. Lord Belfort, seca su rostro sudoroso con un blanco pañuelo de fina tela importada, mirando con desprecio como queda manchado de color arcilla por la gran cantidad de tierra del camino, que se levanta tras el apresurado paso de su comitiva en el recorrido de regreso desde la casa de campo donde estaba de vacaciones.

  Nuevamente, hoy retomará sus funciones como regente del castillo, teniendo que atravesar por el único sendero construido para carruajes, que por los barrios pobres de la ciudad y el mercado, lo cual le causa un especial desagrado, viéndose obligado a soportar, según sus pensamientos, el hedor a pobres que sudan los súbditos del reino, a los que simplemente tiene como inferiores, es más, apenas los considera humanos, por eso gira instrucciones a su cochero y escoltas de que cabalguen a la mayor velocidad posible, sin importar quien se atraviese, para no estar más de lo necesario entre la muchedumbre.

  Sin embargo, a pesar del desprecio de su Señor, los habitantes de esta comunidad campesina, sienten gran ánimo al ver pasar la Comitiva Real por sus tierras, saludando y aplaudiendo con alegría, ignorando siquiera quien es el que va dentro, ya que nunca han visto en persona a Lord del castillo, solo algunos cuadros pintados en las dependencias principales del gobierno les permiten hacerse una idea que la figura de su regente. Tal cual las órdenes recibidas, la caravana avanza a toda prisa entre las riveras de la comarca alejándose del último poblado en kilómetros antes de llegar a la capital, a lo lejos, comienza a verse la silueta oscura de la fortificación que se muestra imponente sobre la colina más alta, oculto en una nube de vapor y polvo típico de esta época del año.

  Repentinamente, un hecho fortuito del destino, coloca una gran serpiente de cascabel dispuesta al ataque en todo el centro de la vereda, produciendo que los caballos se asusten y el conductor pierda por completo el control de la diligencia que, inevitablemente se vuelca en un aparatoso accidente, dando muchas vueltas sobre sí misma y acabando con la vida de todos sus ocupantes, a excepción del hombre adinerado que viajaba en su interior dejándolo inconsciente, con muchos golpes y una pierna aprisionada bajo el peso de la estructura, debatiéndose entre la vida y la muerte en el fondo de un barranco.

  Un par de horas después, un muchacho del pueblo, — al cual por cierto, por poco atropella la caravana por su alta velocidad, cuando atravesó el mercado— encuentra el lugar donde ocurrieron los hechos, mirando con asombro un escenario dantesco lleno de restos del carruaje y cuerpos de los escoltas reales, a pesar de lo espeluznante de la visión, el campesino revisó a cada uno de los hombres para ver cómo podía asistirlos, hasta que encontró al Lord y se dio cuenta de que aún estaba con vida, así que le humedece el rostro con un poco de agua para hacerlo reaccionar. Cuando volvió en sí, este funesto y despreciable gobernante, en lugar de agradecer el apoyo, miró con asco al chico, comenzando a insultarlo por haberlo tocado, cosa que asustó muchísimo al joven que salió corriendo, mientras el hombre atrapado arrepentido de lo que había hecho, suplicaba por ayuda, casi convencido de que sería abandonado en la soledad de aquel barranco a su suerte.

  Para su sorpresa la solidaridad humana no tiene límites, a pesar de sus insultos y amenazas, realmente el campesino no huyó del lugar, solo fue a buscar el apoyo de los habitantes del pueblo, que rápidamente asistieron con palancas y caballos para liberar de los escombros al hombre moribundo, sin importarles que fuera o no el regente, ni las cosas que había hecho con sus altos impuestos. Simplemente, prestaron colaboración en grupo a una persona atrapada igual a ellos, que requería ayuda, cambiando de esta forma para siempre la manera de pensar del Lord, haciéndolo entender que ante la hora de la muerte no importa el poder ni el dinero, todos pasan por el mismo camino tan igual como cuando el creador los trajo a este mundo.

Do good without looking to whom

  A tyrant monarch will discover how noble his people and human solidarity can be when they least expect it.

  The summer heat presses with all its strength, suffocating the powerful man who travels inside the stagecoach in this morning of radiant sunshine and hot wind full of dust, which burns when rubbing against the skin as if the air had its origin in hell itself. Lord Belfort dries his sweaty face with a white handkerchief of fine imported cloth, looking with contempt as it is stained clay-colored by the large amount of dirt on the road, which rises after the hurried passage of his retinue on the way back from the country house where he was on vacation.

  Again, today he will resume his duties as regent of the castle, having to traverse the only path built for carriages, which through the slums of the city and the market, which causes him particular displeasure, being forced to endure, according to his thoughts, the stench of the poor that the subjects of the kingdom sweat, whom he simply regards as inferior, indeed, he barely considers them human, so he instructs his coachman and escorts to ride as fast as possible, no matter who crosses them, so as not to be more than necessary in the crowd.

  However, despite the contempt of their Lord, the inhabitants of this peasant community, feel great encouragement to see the Royal retinue pass through their lands, greeting and applauding with joy, ignoring even who is the one who goes inside, since they have never seen in person the Lord of the castle, only some pictures painted in the main dependencies of the government allow them to get an idea that the figure of their regent. According to the orders received, the caravan advances at full speed between the banks of the region, moving away from the last village for miles before reaching the capital, in the distance, begins to be seen the dark silhouette of the fortification that appears imposing on the highest hill, hidden in a cloud of steam and dust typical of this time of the year.

  Suddenly, a fortuitous event of destiny places a large rattlesnake ready to attack in the middle of the road, causing the horses to panic and the driver to completely lose control of the stagecoach, which inevitably overturns in a spectacular accident, The stagecoach inevitably overturned in a spectacular accident, turning over many times and killing all its occupants, except for the wealthy man who was traveling inside, leaving him unconscious, with many bruises and a leg trapped under the weight of the structure, debating between life and death at the bottom of a ravine.

  A couple of hours later, a boy from the village —who, by the way, was almost run over by the caravan due to its high speed, when it crossed the market— finds the place where the events occurred, looking with astonishment at a grotesque scene full of remains of the carriage and bodies of the royal escorts, Despite the horrifying sight, the peasant checked each of the men to see how he could assist them, until he found the Lord and realized that he was still alive, so he moistened his face with a little water to make him react. When he came to, this dismal and despicable ruler, instead of thanking him for his support, looked at the boy with disgust, beginning to insult him for having touched him, which frightened the young man who ran away, while the trapped man, sorry for what he had done, begged for help, almost convinced that he would be abandoned in the loneliness of that ravine to his fate.

  To his surprise, human solidarity has no limits, despite his insults and threats, the peasant did not really flee the place, he only went to seek the support of the villagers, who quickly assisted with crowbars and horses to free the dying man from the rubble, without caring whether he was the regent, nor the things he had done with their high taxes. They simply collaborated as a group to a trapped person just like them, who needed help, thus changing forever the Lord's way of thinking, making him understand that at the hour of death, no matter the power or money, everyone goes through the same path as when the creator brought them to this world.

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Esta historia es ficticia y no representa a nadie en particular.

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