Relato. "El hospital: donde los monstruos solo salen de noche…" Capítulo 1. Elena.//Story. "The hospital: where monsters only come out at night..." Chapter 1. Elena. (ESP//ENG)
“Aunque lo veas, siempre dudarás, pero la duda es el camino a la verdad…”
Saludos a todos. “El hospital: donde los monstruos solo salen de noche” Es una historia cuyo primer capítulo “Elena”, se desenvuelve alrededor de una enfermera novata que afronta unos casos difíciles en un hospital psiquiátrico. Donde conocerá a Carlos, un paciente que guarda un secreto que podría cambiar todo. Prepárense para vivir el suspenso y el terror en una noche que pondrá a prueba tu valentía. Esta historia de miedo psicológico te dejará helado. ¡Lee y comenta!
El hospital: donde los monstruos solo salen de noche…
Capítulo 1. Elena.
No me gusta este lugar. El hospital psiquiátrico San Miguel es un infierno en la tierra, un lugar donde los locos se esconden. Está lejos de la ciudad, en medio de la nada, rodeado de un bosque sombrío y silencioso. El edificio es viejo, con paredes desconchadas y ventanas rotas. El aire que percibo huele a moho y a muerte. Se siente como una manta fría que me envuelve y me asfixia. Soy Elena, una enfermera recién graduada que he venido a trabajar aquí por necesidad.
Es el primer día y me recibe el Dr. Sánchez, el jefe del departamento de psiquiatría. Es un hombre serio, severo, usa una bata blanca, gafas con montura metálica. Me habla con voz monótona, explica las normas y los procedimientos del hospital. Me dice que me han asignado al último piso, donde están los pacientes más peligrosos. Me advierte que esté atenta y no me deje engañar por lo que veo o por lo que me dicen.
Me lleva a recorrer el piso que me asignaron, donde hay una serie de celdas acolchadas y rejas. Allí dentro de ellas, veo a los internos, algunos tumbados en el suelo, otros sentados en las esquinas, mientras que otros golpean las paredes gritando. Todos tienen miradas vacías y perdidas, como si no estuvieran en este mundo. El Dr. Sánchez me va diciendo sus nombres, sus edades, sus diagnósticos y sus tratamientos. Intento memorizarlos, pero son demasiados. Algunos sufren de esquizofrenia, otros de paranoia, otros de psicosis. Algunos se creen dioses, otros que son animales, o personajes de ficción. Algunos han intentado quitarse la vida.
Llegamos al final del pasillo, donde hay una puerta más grande y más reforzada que las demás. El Dr. Sánchez me comenta que detrás de ella se encuentra Carlos, el paciente más extraño y enigmático de todos. Me cuenta que lo hallaron hace unos meses en una zona muy remota de la ciudad, vagaba sin rumbo, con heridas en la mayor parte del cuerpo y la ropa manchada de sangre.
Lo trajeron al hospital y lo diagnosticaron con un tipo de trastorno aún desconocido. No tiene memoria de su pasado ni quién es. Dice que es un monstruo y que los demás también lo son. Asegura que algunas noches se transforma y sale a cazar para alimentarse. Carlos está loco, según el doctor. Es por ello que le dan suficientes sedantes para evitarlo, pero el doctor confía en que algún día mejorará.
La historia del Dr. Sánchez me eriza la piel. No puedo creer lo que me cuenta sobre Carlos, el paciente que está tras el cristal blindado. Su rostro es inexpresivo, como si nada le importara. Sus ojos son verdes brillantes, como dos esmeraldas que hipnotizan. No puedo dejar de mirarlo, aunque sé que no debería.
Pero yo no estoy tan segura. Hay algo en Carlos que me intriga y me atrae al mismo tiempo. Algo que me hace pensar que tal vez no está tan loco como dicen. Algo que el doctor no sabe o no quiere decir.
A las seis de la tarde empiezo mi ronda por el quinto piso, donde están los pacientes más peligrosos. Reviso sus estados y les doy los medicamentos. Todo parece normal, salvo que algunos están más alterados que otros.
Les pregunto qué les pasa, pero no me contestan. Balbucean algunas cosas en voz baja. Les presto atención y logro entender algo. "Miedo". Señalan que algo malo va a pasar. Dicen que se acerca la noche en la que todos serán liberados.
No entiendo lo que comentan, quizás es el efecto de la noche, que lo hace todo más sombrío y siniestro.
Termino mi ronda y me voy a la sala de descanso, donde hay todo lo que necesito para relajarme. Una vieja máquina de café, un pequeño refrigerador y un sofá verde desgastado. Me sirvo un café y hojeo una revista médica. Miro el reloj y bostezo. Me doy cuenta de que todavía me faltan tres horas para terminar mi turno.
Escucho un grito desgarrador que viene del ala principal. Me asusta mucho. Salgo corriendo de la habitación hacia donde viene el sonido. Me quedo paralizada en medio del pasillo por lo que veo.
Dos pacientes están fuera de su habitación. Uno de ellos está en el suelo, cubierto de sangre. Reconozco que es Carlos, tiene el cuello y el abdomen abiertos. El otro está sobre él: Luis, su cuerpo se ha transformado en algo sin forma, le arranca trozos de carne con los dientes. Su cara está deformada por una expresión salvaje de animal. Sus ojos son rojos y muestra unos colmillos afilados.
El encuentro de miradas termina, cuando Luis salta sobre mí.
Me tira al suelo. Siento sus dientes clavarse en mi cuello y un dolor insoportable. Grito, pero nadie me oye. Veo la sangre de Carlos y la mía mezclarse en el suelo. Veo su cara de terror. Veo la noche y los monstruos. Y luego todo se vuelve negro.
Despierto en una camilla, rodeada de gente con batas blancas. Me duele todo el cuerpo. Quiero hablar, pero solo puedo gemir. El Dr. Sánchez se acerca y me dice que he tenido suerte, que he sobrevivido al ataque de Luis, que ya lo han sedado y aislado. Me dice que Carlos también está vivo, pero muy grave. Me dice que no me preocupe, que todo está bajo control.
Pero yo no me quedo tranquila. Sé que lo que he visto no es normal, que hay algo más detrás de todo esto. Algo que tiene que ver con la noche, con los monstruos, con Carlos. Algo que el Dr. Sánchez no me dice. Algo que tal vez no quiera saber.
Continuará...
J. R.M.(@siondaba)
English Version
"Even if you see it, you will always doubt, but doubt is the path to truth.”
Greetings to all. 'The Hospital: Where monsters only come out at night' is a story whose first chapter, 'Elena,' unfolds around a novice nurse facing challenging cases in a psychiatric hospital. There, she will meet Carlos, a patient harboring a secret that could change everything. Get ready to experience suspense and terror on a night that will test your courage. This psychological horror story will leave you chilled. ¡Read and comment!
The hospital: where monsters only come out at night...
Chapter 1. Elena.
I don't like this place. San Miguel Psychiatric Hospital is hell on earth, a place where the insane hide. It's far from the city, in the middle of nowhere, surrounded by a dark and silent forest. The building is old, with peeling walls and broken windows. The air I breathe smells of mold and death. It feels like a cold blanket enveloping and suffocating me. I'm Elena, a newly graduated nurse who has come to work here out of necessity.
It's the first day, and Dr. Sanchez, the head of the psychiatry department, greets me. He is a serious, stern man, wearing a white coat and glasses with a metal frame. He speaks in a monotone voice, explaining the rules and procedures of the hospital. He informs me that I've been assigned to the top floor, where the most dangerous patients are. He warns me to be vigilant and not be deceived by what I see or what I'm told.
He takes me to tour the floor I've been assigned, where there are padded cells and bars. Inside them, I see the patients, some lying on the floor, others sitting in corners, while others pound the walls and scream. They all have empty and lost looks, as if they're not in this world. Dr. Sanchez tells me their names, ages, diagnoses, and treatments. I try to memorize them, but there are too many. Some suffer from schizophrenia, others from paranoia, others from psychosis. Some believe they are gods, others believe they are animals or fictional characters. Some have attempted suicide.
We reach the end of the hallway, where there's a larger and more reinforced door than the others. Dr. Sanchez tells me that behind it is Carlos, the strangest and most mysterious patient of all. He explains that they found him a few months ago in a very remote area of the city, wandering aimlessly, with wounds covering most of his body and clothes stained with blood.
They brought him to the hospital and diagnosed him with a type of disorder still unknown. He has no memory of his past or who he is. He claims he is a monster, and so are the others. He insists that some nights he transforms and goes out to hunt for sustenance. Carlos is crazy, according to the doctor. That's why they give him enough sedatives to prevent it, but the doctor believes he will improve someday.
Dr. Sanchez's story sends shivers down my spine. I can't believe what he's telling me about Carlos, the patient behind the reinforced glass. His face is expressionless, as if nothing matters to him. His eyes are bright green, like two hypnotic emeralds. I can't stop looking at him, even though I know I shouldn't.
But I'm not so sure. There's something about Carlos that intrigues and attracts me at the same time. Something that makes me think he might not be as crazy as they say. Something the doctor doesn't know or doesn't want to say.
At six in the evening, I start my rounds on the fifth floor, where the most dangerous patients are. I check their conditions and administer their medications. Everything seems normal, except that some are more agitated than others.
I ask them what's wrong, but they don't answer. They mutter some things quietly. I pay attention and manage to understand something. "Fear." They indicate that something bad is going to happen. They say the night is approaching when everyone will be set free.
I don't understand what they're talking about; maybe it's the effect of the night, making everything darker and more sinister.
I finish my rounds and go to the break room, where there's everything I need to relax. An old coffee machine, a small refrigerator, and a worn-out green sofa. I pour myself a coffee and flip through a medical magazine. I check the clock and yawn. I realize I still have three hours left to finish my shift.
I hear a piercing scream coming from the main wing. It scares me a lot. I rush out of the room toward the source of the sound. I stand paralyzed in the middle of the hallway by what I see.
Two patients are out of their rooms. One of them is on the floor, covered in blood. I recognize him as Carlos; his neck and abdomen are open. The other is on top of him: Luis. His body has transformed into something shapeless; he tears chunks of flesh with his teeth. His face is deformed with a wild, animalistic expression. His eyes are red, showing sharp fangs.
The eye contact ends when Luis jumps at me.
He knocks me to the ground. I feel his teeth sinking into my neck, causing unbearable pain. I scream, but no one hears me. I see Carlos's and my blood mixing on the floor. I see his face of terror. I see the night and the monsters. And then everything goes black.
I wake up on a stretcher, surrounded by people in white coats. My whole body hurts. I want to speak, but all I can do is groan. Dr. Sanchez approaches and tells me I've been lucky, that I survived Luis's attack, that they have sedated and isolated him. He tells me Carlos is also alive but in critical condition. He assures me not to worry, that everything is under control.
But I'm not reassured. I know what I've seen is not normal, that there's something more behind all this. Something to do with the night, the monsters, Carlos. Something Dr. Sanchez is not telling me. Something I might not want to know.
To be continued...
J. R.M.(@siondaba)
0
0
0.000
Gracias por su visita. Agradezco al Trail @rutablockchain por su apoyo...
Congratulations @siondaba! You have completed the following achievement on the Hive blockchain And have been rewarded with New badge(s)
Your next target is to reach 250 posts.
You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP
To support your work, I also upvoted your post!
Esta publicación ha recibido el voto de Literatos, la comunidad de literatura en español en Hive y ha sido compartido en el blog de nuestra cuenta.
¿Quieres contribuir a engrandecer este proyecto? ¡Haz clic aquí y entérate cómo!