Yo no sabía

Vida...yo no sabía a que me trajiste al mundo,

Yo no sabía que vivir dolía, vine a la vida creyendo que la vida era color de rosas, pero al pasar el tiempo, me dí cuenta que la vida también se pintaba de gris, que hay estaciones en mi vida que se han pintado de primaveras, que existen días en que hay un océano de sonrisas, días que me han llenado la vida de hermosos colores tornasol... y días de penumbra, que han inundado mi vida de lluvias incesantes, días en que el amor se debilita como un cuerpo ebrio de vino puro,

Vida...yo no sabía que el dolor existía; y que él mismo me apagaria las sonrisas, yo no sabía de esa señora en penas llamada tristeza,

Vida... yo tampoco sabía de esa dama Vestida de invierno frío llamada depresión...yo vine a la vida creyendo que mis sonrisas harían resplandecer mi rostro, vine a la vida creyendo que mi mundo sería un paraíso, y que ese caballero rudo llamado sufrimiento, no tocaría mi puerta,

Vida... a veces quiero ocultar mis lágrimas con una sonrisa, es un hermoso maquillaje que oculta mis tristezas; más mis lágrimas caen en las ventanas de mi alma, Llenando de penumbras ese mundo que tanto anhelo,

Lo sé...queda prohibido no sonreír...

Pero como diaria Neruda en uno de sus poemas

" tengo sed"

Tengo sed del amor puro y cristalino,

Tengo sed de palabras dulces que llenen ese vacío que a veces siento en mi alma,

Tengo sed de beberme al mundo en una copa del más fino vino, y diluir en amor mezclado con poesía el mundo así cambiaría,

Tengo sed de esas sonrisas que rejuvenecen mi rostro, tengo sed de paz en este mundo lleno de incertidumbre; tengo sed de la verdad, sed de sinceridad y esa sequía quema por dentro, arde de sed el alma mía por cambiar el mundo y mi vida, y embriagarme de mil sonrisas, y pintar con este amor que llevo dentro de mí un mundo de colores que alegren mis días...

Pero es inevitable no llorar cuando la tristeza se hospeda en mi alma, cuando todo en mi interior se derrumba...

Más en mi alma guardo la esperanza que el tiempo mismo va destruyendo mis quimeras esas que calcinan mis sonrisas; y siempre se mantiene viva la esperanza de que en mi interior brotará como retoño, ese amor puro y sincero que colorea mi mundo, Y dibuja sonrisas que me hacen volver a vivir, siempre guardo en mi alma amor y esperanza.