Llegas de repente

Llegas de repente, llegas sin ninguna explicación y a tu llegada se desquician los sentidos y vuelves loco al corazón.

Lentamente te vas acomodando entre los rincones del alma, mientras en el pensamiento se forman calles, avenidas, plazuelas, donde caminarás a tu entera disposición, no importando el día ni la ocasión.

Llegas de repente y te vuelves una causa justa, el porqué de un suspiro, el porqué se habla con la luna, nace el desvelo y se ansían los rayos del sol.

Te vas convirtiendo en esa imperfección, en la diferencia entre lo real de la imaginación, tus rasgos son únicos, tu existencia se hace tangible, más tu estadía es etérea, tienes el poder para que el corazón se sienta omnipotente, das la fuerza de mil guerreros y contigo se adquiere la valentía, esa valentía para expresar los sentimientos en una simple y llana oración.

Más cuando te alejas...Todo se vuelve añicos, la vacuidad se apodera del pensamiento, el alma vacía se siente, las calles han quedado solas, la palabra muere lentamente, los sentimientos yacen en sus recuerdos, los ojos lagunas son, sólo queda amargura y desolación.

De noche se siente el abrazo del olvido, de día no se encuentra el camino, poco a poco va invadiendo la desesperación, todo es silencio y un leve recuerdo se haya colgado en el rincón de alguna habitación.

Llegas de repente sin aviso, sin invitación, unos te abrazan, otros de ti se alejan pocos son los que en ti no creen, pero eres parte de una vida, de la existencia de esta humanidad, muchos no pueden vivir contigo, otros no sin ti no pueden estar.

Llegas con muchos regalos, los días son festivos, más te alejas en silencio, te vas como un ladrón, llegas de repente, te vas sin ninguna explicación.

Amor...amor, llegas de repente y te vas sin importarte el dolor.