Triste despedida para el Team Cuba
Cuba cayó hoy 6-7 ante el invicto Japón en el Tianmu Baseball Stadium de Taipéi y quedó sin opciones de medallas en el III torneo beisbolero Premier 12, donde asisten los países mejor ranqueados del mundo.
Los dirigidos por Armando Johnson no pudieron imponerse contra los vigentes monarcas y números uno del ranking mundial y con un triunfo y tres fracasos perdieron toda esperanza de conseguir un cupo para la siguiente instancia, a falta de un partido para concluir la fase de grupos.
Un total de ocho imparables conectaron los samuráis de la Tierra del Sol Naciente para imponer su favoritismo, lograr su cuarto éxito en igual cantidad de salidas y asegurar un puesto en la superronda a disputarse en su país del 20 al 24 de este mes, donde los esperan Venezuela y Estados Unidos, clasificados por el grupo de América.
Desde el segundo capítulo, cuando el abridor Raymond Figueredo golpeó a un rival, boleó a otro y permitió un sencillo impulsador del designado Keita Sano, los dirigidos por Hirokazu Ibata tomaron el mando.
Dos incogibles y un boleto decretaron la explosión del diestro capitalino en el segundo acto y si los asiáticos solo marcaron una rayita fue por el gran rescate de Geonel Gutiérrez, quien recetó par de ponches a sus contrarios.
El zurdo aceptó una en el cuarto cuando le pegaron dos cohetes y otra en el quinto remolcada por inatrapable de Shugo Maki ante un envío de su sustituto Frank Luis Medina.
Con Darío Sarduy en el montículo los japoneses conectaron su tercer elevado de sacrificio del juego para traer a casa su quinta carrera y tomar una ventaja que parecía inalcanzable, pero los cubanos armaron un motín cerrando el segundo tercio de juego.
Un paquete de tres carreras, todas a la cuenta del abridor Takahita Hayakawa, fabricaron los antillanos gracias a un doblete de Yadir Drake (se fue de 5-3 con par de remolques) y a cañonazos consecutivos de Erisbel Arruebarrena y el emergente Yoan Moncada.
La dirección del equipo colocó en la lomita a su as Liván Moinelo (aquejado por problemas de salud) y este permitió un indiscutible, propinó un pelotazo y regaló un par de boletos, uno de ellos con los ángulos congestionados, para que sus contrarios volvieran a despegarse en el marcador.
En el llamado capítulo de la suerte un error en tiro del relevista y ganador Tatsuya Shimizu provocó que las puertas del plato se abrieran dos veces y la tropa cubana igualara las acciones, pero los samuráis anotaron la ventaja definitiva en el octavo tramo, sucia a la cuenta del derrotado Moinelo por una pifia de Arruebarrena y otro elevado de sacrificio, este de Ryoya Kurihara.
A la hora de recoger los bates Cuba continuó peleando y llenó las almohadillas por pelotazo y sencillos de Alfredo Despaigne y Ariel Martínez, pero el cerrador Shoma Fujijira les recetó ponches a Moncada y a Andy Cosme para ponerle fin a la historia.
Los de la mayor isla del Caribe se despedirán mañana del torneo con el partido frente a los locales de China Taipéi, pactado para las 18:30, hora local (05:30 en Cuba) en el Taipei Dome.
La verdad es que Cuba plantó cara ante los samuráis, como muy pocos vaticinaron. Eso demuestra que hay calidad en nuestros peloteros y que tenemos la materia prima suficiente a pesar de miles de obstáculos (internos y externos), pero no la fábrica para elaborar el producto final.
Con mucho dolor tengo que aceptar que los que mueven los hilos de los partidos de béisbol de nuestra selección nacional no supieron interpretar bien las capacidades de sus atletas, a pesar de una larga preparación y de una provechosa gira por Asia donde tuvieron la oportunidad de diseñar el modelaje competitivo.
Eso se paga caro en este deporte. Vacilaciones, miedos a los cambios, línea central inestable, falta y exceso de confianza en algunos casos y desconocimiento del entorno provocaron cabezazos y dejaron una imagen de falta de control de la situación desde el primer partido.
Es una lástima, porque no hay quien me quite la idea de que ese equipo podía hacer más, no obstante todos esos vientos tormentosos que atacan a nuestro pasatiempo favorito, que ya hemos mencionado en múltiples ocasiones.
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Así es mi estimado amigo. Pero, de nada vale tener un buen equipo si no tenemos una dirección a la altura. Otra decepción para el deporte nacional. Feliz jornada. Salud y saludos.
Es que yo no sé por qué ese encarne de la Federación Nacional de Béisbol Cubana con Armando Jhonson, si ese hombre no ha demostrado nada, un equipazo en el Clásico a su disposición, ahora otro equipo nivel casi triple A, los resultados son apotiosos.
Desgraciadamente los resultados internacionales que está teniendo la Federación Cubana de Beisbol, nos hablan con voz propia de lo necesario de un cambio de política radical en nuestro deporte pasatiempo nacional. Una liga como la nuestra no puede competir con ese nivel profesional donde les sobra el oficio así como la disciplina como para vender al team Cuba. Lastimosamente nunca veremos una Federación Cubana de Beisbol Profesional en este país, donde el PCC tiene que meter las manos en todo.