Un Tributo al Fútbol en el Etihad Stadium

Dentro del convulso y casi cancelado Boxing Day inglés, el Manchester City de Pep Guardiola y el Leicester City de Brendan Rodgers nos regalaron un partido tan vibrante que hizo cimbrar los cimientos del Etihad.

Fueron 90 minutos de un brindis al gol, una absoluta locura, un marcador de otra época, un resultado de tenis... “game, set and match” para los de Guardiola, pero tanto Cityzens como Foxes han dignificado el Boxing Day, el día más especial del año en para el futbol en Inglaterra, en un espectáculo absoluto dentro del terreno de juego.

En 25 minutos la maquinaria de Guardiola se había puesto adelante con un escandaloso 4-0; ¿Quién iba a pensar que los Foxes se iban a reponer del mazazo que representaba ir con esa pesada loza al descanso? Ni el más entusiasta hinca del Leicester lo habría hecho, pero esto es la Premier. Los de Guardiola adelantaron muchísimos metros para presionar y los de Rodgers, auténticos especialistas en el complejo arte del contragolpe, pusieron el partido patas arriba. Maddison, Lookman e Iheanacho lograron imponer el 4-3 en el luminoso en tan solo diez minutos, silenciaron un Etihad en el que el ambiente festivo de la hinchada local cambio por miedo e incertidumbre. Marcar 3 goles en 10 minutos a este Manchester City es una gesta enorme, sobre todo si se toma en cuenta que los “Sky Blue” no recibían tres goles en le Premier League desde mayo de este año que cuenta sus últimos días.