"El hombre solitario es una bestia o un dios." Aristóteles.

Hay una tendencia en redes sociales que observo a diario sobre jóvenes adultos compartiendo frases acompañadas de imágenes sobre las bondades de estar solo, sobre la tranquilidad y la paz que no dan ciertas compañías, y a los días una misma publicación sobre alguna necesidad de salir de sus casas a despejar la mente; esto me hace pensar sobre qué conflictos tienen esos individuos en cuanto a la relación que existe entre la soledad y el autoestima. Muchos son seres que buscan llamar la atención bajo la excusa que siempre me ha sacado de mis casillas, "es sólo una publicación"; como si los nazis hubiesen dicho "es sólo una broma", pero en realidad es un disfraz que intenta generar interés en las personas que le siguen, es decir, se hacen los interesantes.

"La soledad es la suerte de todos los espíritus excelentes." Arthur Schopenhauer.

En primer lugar, a ninguna persona que le siente bien estar solo le hace falta intentar que otro se entere de eso, por naturaleza cuando alguien se entera sobre la comodidad de una persona, este también la quiere para él y por lo menos acudirá a esa persona para ver cómo forma parte de esa comodidad igualmente. Esto genera que quien esté solo ya no lo esté, entonces es ilógico que alguien pretenda estar solo manifestando que se siente a gusto estando solo; por eso coincido en que las personas que vociferan sobre el bienestar de su soledad sólo están buscando llamar la atención de otras personas porque les incomoda estar solos consigo mismos.

"La soledad es el imperio de la conciencia." Gustavo Adolfo Bécquer.

La acción de estar solos implica conocerte a ti mismo desde adentro, esto quiere decir que nadie te va a decir cómo eres, sino que tú mismo mediante un proceso cognoscitivo comenzarás a aprender sobre costumbres, sentimientos, pensamientos, gustos, etc. y ten en cuenta que muchas personas al pasar por este proceso no terminan gustándose ni un poquito, por eso les aterra estar solos porque no se llevan bien con su interior. Es por eso que estas personas buscan siempre de estar rodeadas de otras personas con las que sí les guste estar, bien sea en fiestas, reuniones, bailes, en fin, un lugar que no sea su propia casa con su propio cuerpo.

"Nadie aprende, ni tan siquiera se enseña a soportar a la soledad." Friedrich Nietzsche.

Que nos guste estar solos no quiere decir que no debamos disfrutar con otras personas, o que no nos gusta más nadie sino nosotros mismos, depende más bien del tipo de persona porque hay quienes disfrutan más con sus familiares, otros con sus amigos del trabajo o la escuela, hay quienes han sufrido traumas y sólo les gusta compartir con cierto tipo de personas, y hay quienes han experimentado lo peor del ser humano y tienen la fuerza necesaria para vivir fuera de la civilización y lejos del contacto humano. No necesariamente disfrutar de la soledad es renuncia al contacto humano o social, pero hay personas que deciden por su bienestar alejarse de las demás personas, y con frecuencia son vistos de mala manera como ermitaños y dementes. Es importante mencionar que hay personas que le temen a la soledad, bien sea por la pérdida de un ser muy cercano donde le aterra la idea de estar solo o sola porque le recuerda constantemente esa pérdida, o porque son personas sensibles al tema espiritual y fantasmal, y les aterran los sonidos extraños que se puedan producir en la soledad.

"La soledad es la gran talladora del espíritu." Federico Garcia Lorca.

Sea cual sea tu situación, la soledad no es nada bueno ni nada malo aunque sus repercusiones terminan siendo maniqueístas, pero es un proceso por el que se atraviesa desde lo individual y no desde lo colectivo; es un error pensar que la soledad se puede explorar acompañado de otra persona como aquella canción famosa de un compositor de baladas argentino muy polémico en la actualidad que no voy a nombrar. La soledad es un proceso por el que forzosamente debe atravesar una persona sin ayuda de nadie, para que así se pueda lograr el verdadero propósito de la soledad que es conocerse a sí mismo, explorar el interior de nuestra concepción y discernir la profundidad de nuestra existencia; es irracional pensar que otra persona pueda determinar los límites en donde existimos porque somos nosotros los que decidimos, partiendo desde nuestro propio conocimiento, hacia dónde se dirige nuestra existencia.

"Estamos solos, vivimos solos y morimos solos. Solo a través del amor y la amistad podemos hacernos la ilusión, por un momento, de que no estamos solos." Orson Welles.