This week's theme made me remember a certain stage of my life, one that I do not remember with nostalgia but that I am extremely grateful to have lived; It was a stage marked by loss and by adverse and overwhelming circumstances that exceeded my own strength... at that time I asked myself many questions... would one day alleviate my anguish? What could calm my despair? How could he silence the cry of the soul that in silent monologue wondered about the meaninglessness of life and suffering? What water could quench my thirst? What bandage could heal the wounds of my soul?

  When I thought I couldn't take it anymore, an unexpected force burst into the dark room in which I found myself alone and helpless... The Word came into my life like dawn at dark dawn... How dew of life it made greening the desert of my soul... After receiving the beautiful gift of faith by the grace of God, I began to walk with confidence and without fear of tomorrow...

  The song that I present to you today was composed at that stage in which I learned to abandon myself in the Lord and to trust in Him, in his providence and in his pedagogy, in his love and in his mercy. Loving is a decision, believing is a decision, loving and believing in God is more than a decision, it is a full anticipation of eternal happiness.

  I say goodbye to you not without first wishing you peace and happiness.

SPANISH VERSION

  El tema de esta semana me hizo recordar cierta etapa de mi vida, una que no recuerdo con nostalgia pero que agradezco enormemente haber vivido; fue una etapa marcada por la pérdida y por circunstancias adversas y abrumadoras que rebasaban mis propias fuerzas... en ese tiempo me hacía muchas preguntas... aliviaría algún día mi angustia? Qué podía calmar mi desesperación? Cómo podía callar el grito del alma que en silente monólogo se interrogaba por el sinsentido de la vida y del sufrimiento? Qué agua podía saciar mi sed? Qué venda podría curar las heridas de mi alma?

  Cuando pensaba que ya no podía más, una fuerza no esperada irrumpió en la habitación oscura en la que me encontraba sólo y desvalido... La Palabra llegó a mi vida como el alba a la oscura madrugada... Cómo rocío de vida que hizo reverdecer el desierto de mi alma... Después de recibir el hermoso don de la fe por la gracia de Dios, comencé a caminar con confianza y sin miedo al mañana...

  La canción que hoy les presento la compuse en esa etapa en la que aprendí a abandonarme en el Señor y a confiar en Él, en Su providencia y en Su pedagogía, en Su Amor y en Su misericordia. Amar es una decisión, creer es una decisión, amar y creer en Dios es más que una decisión, es un anticipo pleno de la felicidad eterna.

  Me despido de ustedes no sin antes desearles paz y felicidad.