Saludos, mis respetados y admirados amigos de Hive y en especial a las madres y padres de esta hermosa comunidad de @motherhood, por acá estoy para traerles una publicación 100% original en donde los más pequeños de la familia son los protagonistas, en esta ocasión no les traigo consejos que los puedan ayudarlos en la crianza de nuestros hijos, más que todo es una reflexión que he hecho en los últimos días, cuando somos niños vemos que 20 años pueden pasar muy lentamente o los vemos como toda una eternidad, pero cuando nos convertimos en padres esos años pasan muy rápido y sin querer nos perdemos de algunos momentos claves en el desarrollo de nuestros hijos, es que necesariamente tenemos que trabajar para poder brindarles una vida de calidad que incluye educación y salud, y en Venezuela y gran parte del mundo estas dos necesidades son bastante costosas, y más si las que les queremos ofrecer a nuestros hijos son de buena calidad.

Lo cierto es que cuando la madurez llega a nuestras vidas nos autoevaluamos en muchos aspectos de nuestras vidas y nuestra labor como padres no puede ser la excepción, sé que no me puedo catalogar como el mejor padre del mundo, primero que nada somos humanos y como tal tenemos imperfecciones y cometemos muchos errores, pero si siento que en lo que estuvo a mi alcance hice lo mejor, y gracias a Dios ha sido mi hija quien me lo ha hecho saber y eso me hace sentir pleno y muy feliz, ya que a pesar de ser un padre sumamente joven, acepte la responsabilidad, con temores y todo, pero jamás me hice el desentendido, a lo largo de mi vida he visto como hombres con una edad que doblaba la mía cuando me enteré de que sería padre, son totalmente irresponsables y son capaces de dejar a un lado a lo más preciado en nuestras vidas, como lo son nuestros hijos.

Lo único que cambiaria de poder retroceder el tiempo, es que trataría de estar más presente en los primeros 5 años de vida de mi hija, es que quise ser tan responsable que me dedique por completo a trabajar el doble, ahora sé que no todo puede ser material, poder ver sus primeros pasos y caídas es fundamental, mucho más si estás haciendo la doble función o intentando cubrir algunas funciones que por lo general hacen las madres, por suerte conté con el apoyo de mi madre, ya que la mamá de mi hija fue quien no quiso tener o cumplir con sus responsabilidades, estar cuando dicen sus primeras palabras por muy sencillo que se vea, es algo que con el paso de los años se queda en nuestros recuerdos, pero hay que aceptar lo que paso y lamentablemente el tiempo pasa y no regresa.

Actualmente, tengo la dicha de tener a mis nietos y he podido observar cómo han evolucionado y que realmente crecen en un abrir y cerrar de ojos, es que no hace mucho estaba haciendo publicaciones de Dylan siendo un hermoso bebé de ojos azules, ya al día de hoy el cambio físico en evidente, lo mismo aplica para Ian y para mi hermosa princesa Lya, aunque no los estoy disfrutando como quisiera, estoy consciente que dentro de todo he estado presente y eso es lo importante, sé que por acá también hay padres jóvenes y les digo que disfruten al máximo cada momento de sus hijos, ya que mañana se convertirán rápidamente en adultos y les tocará a ellos iniciar ese nuevo ciclo de la vida, gracias a Motherhood por ser esa enorme ventana en donde me puedo expresar y dar mis opiniones con lo que tiene que ver con la crianza de nuestros hijos, nos leeremos en una próxima publicación.

Traducción de idiomas: Deepl

Revisión ortográfica: Spellboy

Portada y banners: Canva

---

For the best experience view this post on Liketu