Alfonsina Storni, escritora argentina que falleciera por suicidio el 25 de octubre de 1938, fue una de las más importantes poetas latinoamericanas del siglo XX, pero también una intelectual que representó, de modo especial, la reivindicación práctica de los valores de la mujer en todos los sentidos, desde su afectividad y conducta hasta la expresión literaria.

Para ella este brevísimo homenaje ficcional, alimentado por elementos biográficos, pero, por supuesto, desde la libertad que la ficción nos ofrece.

“He dado mi corazón”. ¡Qué atrevido verso para un entorno tan prejuiciado! Y sí, lo di, con todo desprendimiento, y también mi deseo y mi cuerpo, quizás no tanto como hubiese querido. Alejandro * es el fruto de ese rielar de mar sin diques que quise hacer de mi vida. Horacio ** lo supo; lo conversamos tanto en nuestras tertulias nocturnas de cine y poesía. “Un rayo a tiempo y se acabó la feria...”, te escribí dolida por tu autoinfligida muerte, opción que deambula mi conturbado organismo psíquico. Mi amor siempre estará para ti: “Se me va de los dedos la caricia sin causa”.

En este habitar, lleno de tantas satisfacciones y búsquedas (¡ah, mis queridos alumnos!), de rebeldías necesarias (“allá va esa feminista”, cuántas veces dirían las propias mujeres), se fueron juntando también mis dolores, literalmente en el pecho, que es seno y corazón y alma; particularmente, esta última que los griegos llamaron “psique”. Estoy cada vez más cerca de una crisis que no logro controlar –si lo fuera-. En este grato hotel de Mar del Plata, donde paso estos días, veo ese mar que me acompaña y tienta desde mi sangre. Quisiera descansar como en mi lejana infancia. He esbozado este poemita *** para decirlo en este día que siento con intensidad:

Dientes de flores, cofia de rocío,
manos de hierbas, tú, nodriza fina,
tenme prestas las sábanas terrosas
y el edredón de musgos escardados.

Voy a dormir, nodriza mía, acuéstame.
Ponme una lámpara a la cabecera;
una constelación, la que te guste;
todas son buenas: bájala un poquito.

Déjame sola: oyes romper los brotes…
te acuna un pie celeste desde arriba
y un pájaro te traza unos compases

para que olvides… Gracias. Ah, un encargo:
si él llama nuevamente por teléfono
le dices que no insista, que he salido…

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*Su único hijo, procreado como madre soltera.
** El conocido escritor Horacio Quiroga, quien fuera su gran amigo, y se cree que amante.
*** “Voy a dormir”, como se le conoce, parece ser el último poema escrito por la poeta.

Referencias:

https://es.wikipedia.org/wiki/Alfonsina_Storni
https://www.zendalibros.com/los-mejores-poemas-de-alfonsina-storni/

Aunque es muy conocida, dejo aquí la canción en su honor cantada por Mercedes Sosa: