Negocios oscuros [Esp/Eng]

La llamada al teléfono de Mateus Rizzole, no solo era desconocida, sino que tampoco era habitual que un numero de otro país lo hiciera, en especial, al ganar las elecciones para ser el nuevo fiscal de la ciudad, un puesto muy anhelado por sus adversarios, que al igual que el, deseaban hacerse con el poder.

—Buenas tardes señor Rizzole, es un grato honor saludarle, y además, quisiera extenderle mis felicitaciones por su nuevo nombramiento, estoy seguro que está muy contento por ello —
Rizzole intentó reconocer la voz de su interlocutor, mientras que colocaba la llamada en registro para luego saber de dónde, y de quien provenía.

—No se preocupe por grabar esta llamada señor Rizzole, no será necesario pues, está hablando con un amigo, no con un enemigo. Tan solo quiero conversar un poco con usted, no hay nada malo en ello ¿no es verdad? —

La intriga en Mateus era un poco más angustiosa, muy pocas personas tenían acceso a numero de teléfono, por no decir ninguna.

—Buenas tardes. Me parece incorrecto continuar una conversación sabiendo que usted me conoce a mí, pero yo no a usted. Así que sería grato saber con quien estoy hablando, así entonces podríamos llegar a ser buenos amigos — Respondió Rizzole, en busca de respuesta.

—Llámeme Movidith, así me reconocen algunas personas con las que trabajo, y con las que usted alguna vez trabajo. ¿Ahora sí somo amigos? —

En algún momento, Rizzole había llegado a escuchar ese nombre, aunque eso no era lo importante ahora, sino saber como el hombre había dado con él.

—Muy bien señor Movidith. Es un gusto conocerlo, aunque debo afirmar que no es un nombre común por esta zona, ¿por lo que supongo es extranjero no? —

—Más que extranjero señor Rizzole, es un seudónimo, es bueno tenerlos en caso de que uno no desee que se le conozca por su nombre, o más bien, cuando nuestro nombre es algo feo —

El nombre seguía merodeando en su cabeza, sabía que en algún momento lo había mencionado, o alguien se lo hubiera dicho en alguna ocasión, aunque el asunto no era realmente importante.

—Tiene razón, no es algo común en mi usarlo. ¿A que se debe esta llamada señor Movidith, y como es posible que haya logrado tener mi numero de teléfono? Eso no es algo que me sucede todos los días, por lo que supongo que debe ser algo muy importante, o sencillamente haya algo en que lo pueda ayudar —

—Su número lo conseguí en las paginas amarillas- Dijo sonriendo el hombre- No, no fue así. Ya sabe, con la tecnología, es mucho fácil contactar con algunas personas, así como usted. Pero no se preocupe, no tiene nada de por lo que preocuparse, todo lo contrario, este puede llegar a ser un día de suerte para usted.

Y con relación a si puede ayudarme, estoy agradecido por haberlo dicho, pues sí hay algo con lo que me puede ayudar, y además, es algo que nos puede beneficiar a ambos, y estoy seguro que le encantará —

—Señor Movidith, a menos que esté de acuerdo con la ley, esa es la única manera en que pueda ayudarle. De lo contrario, puede estar seguro que no podrá contar con mi ayuda —

—Mm, es triste escuchar eso, tenía un poco de esperanza en que fuera un poco más flexible. Pero quizás con un pequeño incentivo, las cosas puedan ser así ¿no lo cree?… —
Pensó antes de responder Rizzole.

Sabía que había escuchado alguna vez. Rápidamente corrió hacía su laptop, desencripto todo el disco, y allí vio el paquete de entrega que llegaría en uno de los muelles que estaban a su encargo con el seudónimo “Movidith”, y allí vendría el contenedor con una cantidad incontable de piezas para hacer armar a muchos hombres, contenedor que tenía el nombre “Movidith”.

—¿Quién rayos es usted? ¿Cómo conoce ese nombre? ¿Para quién trabaja? — Dijo con temor Rizzole
—Responderé a la última pregunta. Puede ser que trabaje para usted, o todo lo contrario señor Rizzole, todo depende de usted y de lo que quiera hacer. —

—¿A que te refieres con lo que quiera hacer? —

—Pues fíjese. En su posición como nuevo fiscal, es posible que pueda dar “ciertos permisos” a algunas personas para la que trabajo y que también lo apoyarían a usted indirectamente. Esto no es un soborno, ¿Ya ha escuchado la frase “una mano lava a la otra, y las 2 lavan la cara”? Pues, un favor de usted, es un favor que yo le debería, y que sin duda alguna se lo pagaré —

—¡¿Cómo demonios han llegado saber sobre Movidith?! ¿Fue el desgraciado de Merzá el te que dijo? —

—Shhh señor Rizzole, no conozco a nadie más que a usted, no diga ningún nombre. Con respecto a Movidith, tan solo es cuestión de saber a donde llevan los hilos, pero puedo asegurarle que solo conozco ciertos detalles, pero lo que me interesa es otra cosa —

La cabeza de Rizzole no dejaba de dar vueltas, la intriga lo dominaban por completo, al pensar en que lo que había ocultado por tantos años, ahora era conocido por alguien que apenas había escuchado, mucho menos conocido.

—Mañana señor Rizzole, mañana será un buen día para que conversemos, y entonces le diga que es lo que quiero hacer, y seguramente le encantará mi idea, que pueda dormir bien —

Continuará…

The call to Mateus Rizzole's phone was not only unknown, but it was also unusual for a number from another country to do so, especially after winning the election to become the new city prosecutor, a position much desired by his opponents, who like him, wanted to take power.

-Good afternoon Mr. Rizzole, it is a great honor to greet you, and I would also like to extend my congratulations for your new appointment, I am sure you are very happy about it.

Rizzole tried to recognize the voice of his interlocutor, while he put the call on record to find out from where, and from whom it came from.

-Don't worry about recording this call, Mr. Rizzole, it won't be necessary because you are talking to a friend, not an enemy. I just want to have a little chat with you, there's nothing wrong with that, is there? -

The intrigue in Mateus was a little more distressing, very few people had access to a telephone number, if any.

-Good afternoon. It seems wrong to continue a conversation knowing that you know me, but I don't know you. So it would be nice to know who I'm talking to, then we could become good friends," Rizzole replied, looking for an answer.

-Call me Movidith, that's how some of the people I work with and some of the people you work with recognize me. Are we friends now? -

At some point, Rizzole had come to hear that name, although that was not the important thing now, but to know how the man had found him.

-Very well, Mr. Movidith. It is a pleasure to meet you, although I must say that it is not a common name in this area, so I guess it is a foreigner, isn't it? -

-More than a foreigner Mr. Rizzole, it's a pseudonym, it's good to have them in case you don't want to be known by your name, or rather, when your name is a bit ugly.

The name kept lurking in his head, he knew that at some point he had mentioned it, or someone would have said it to him on some occasion, although the matter was not really important.

-You're right, it's not a common thing for me to use it, what's the reason for this call Mr. Movidith, and how is it possible that you managed to get my phone number? That's not something that happens to me every day, so I guess it must be something very important, or there must be something I can help you with.

-I got your number from the yellow pages," the man said smiling, "No, it wasn't like that. You know, with technology, it's very easy to contact some people, just like you. But don't worry, you have nothing to worry about, on the contrary, this may turn out to be a lucky day for you.

And as to whether you can help me, I am grateful to you for saying so, for there is something you can help me with, and besides, it is something that can benefit both of us, and I am sure you will be delighted.
-Mr. Movidith, unless you agree with the law, that is the only way I can help you. Otherwise, you can be sure you can't count on my help - -Mm, that's sad to hear.

-Mm, that's sad to hear, I had a little hope that you would be a little more flexible. But maybe with a little incentive, things can be like that, don't you think?... -

Rizzole thought before answering.

He knew he had heard it once. He quickly ran to his laptop, decrypted the whole disk, and there he saw the delivery package that would arrive in one of the docks that were at his command with the pseudonym "Movidith", and there would come the container with a countless amount of pieces to put together many men, container that had the name "Movidith".

-Who the hell are you? How do you know that name? Who do you work for? - Rizzole said fearfully.
-I will answer the last question. I might work for you, or the opposite Mr. Rizzole, it all depends on you and what you want to do. -

-What do you mean, what I want to do? -What do you mean, what I want to do? -

-Well, look at it. In your position as the new prosecutor, I may be able to give "certain permissions" to some people I work for and who would also support you indirectly. This is not a bribe, have you ever heard the phrase "one hand washes the other, and both wash their faces"? Well, a favor from you is a favor that I owe you, and that I will certainly repay you.

-How the hell did you come to know about Movidith?! -Was it the wretch Merzah who said? -

-Shhh Mr. Rizzole, I don't know anyone but you, don't say any names. As for Movidith, it's just a matter of knowing where the threads lead to, but I can assure you that I only know certain details, but what I'm interested in is something else.

Rizzole's head was spinning, the intrigue dominated him completely, at the thought that what he had hidden for so many years, was now known by someone he had barely heard of, much less known.
-Tomorrow Mr. Rizzole, tomorrow will be a good day for us to talk, and then I will tell you what I want to do, and you will surely love my idea, may you sleep well -

To be continued...

_{Ismael D. Rodríguez}

_{Discord ismaelrd04#9345}

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