No estoy sano, pero estoy curado [Also in English]

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Siempre he buscado la forma de mantenerme en buen estado físico, mental y espiritual. Soy heredero de una enfermedad crónica, la hipertensión. Esto me ha llevado a ser consiente de qué mis hábitos y actitudes deben ser muy diferente al ser común. Debo poner más empeño en mi salud.

Si estar sano es una armonía en el que todas las funciones del cuerpo y la mente trabajan como la maquinaria de un reloj. Yo tengo un reloj choreto y no puedo cambiar la maquinaria. Entonces debo estar curado de forma constante. Debo controlar la enfermedad y para ello debo tener hábitos saludables como alimentarme bien, ejercitarme, deshacerme del estrés.

Me enteré de que era hipertenso a los 40 años. Sabía que papa lo era, pero me negaba totalmente que yo pudiese haber heredado tal enfermedad. Pues resulto que fui premiado y de los seis hermanos, yo fui el único hipertenso. Recuerdo con claridad a Luis Colmenares, el cardiólogo: a partir de ahora, tu vida debe cambiar significativamente si quieres vivir o si no quieres quedar postrado en una cama.

Sus palabras me asustaron, sentí que era la muerte en vida. Pero en la medida que pasaban los días asumí mi responsabilidad y cambie mi forma de vida. De ser un gran bebedor, pasé a estar en sobriedad mientras veía a mis amigos como se destruían. Todo un espectáculo. De ser un degustador de grasas, comida chatarra y demás, pase a ser alguien que se deleita con un pescado al vapor junto con vegetales o un pollito a la plancha.

Me coronaron el rey del baño por las tantas veces que voy a orinar debido a las grandes cantidades de agua que bebo. La sal o los condimentos artificiales desaparecieron de mis comidas. Ahora, el limón es mi mejor amigo. El estrés, las preocupaciones las llevé a la mínima expresión. Me Falto poco para ser un monje tibetano, pero no tenía que exagerar. No era un ser sano, pero podía ser un hombre curado y para ello me he esforzado mucho.

He asumido con gran responsabilidad mi ausencia de salud. No he dejado que más nada me afecte. Para lograr eso no basto mi sola intención, la familia ha ayudado mucho al ser comprensiva, empática. Es tanto así que todos adoptaron mis nuevos hábitos. Todos estamos en una contante curación, cuidamos de nuestro templo; el cuerpo.

Al ver la actitud de mi familia y el apoyo de amigos me he sumergido en una salud mental óptima. Esa relación cuerpo-mente hace que se mantenga un equilibrio y me aleja de pensamientos como que soy un enfermo crónico. Esto me ayuda para el viaje de vida, me ayuda adaptarme a los cambios, a los desafíos del todos los días. Me hace sentir lleno de energía para así poder cumplir con mis responsabilidades y disfrutar las mieles de la existencia. La consecuencia, soy un exportador de amor.

Soy agradecido con mi padre celestial, porque al enterarme de mi falta de salud, no recurrí a la depresión, sino que le hice caso a ese ángel que fue mi cardiólogo y decidí vivir en un constante estado de curación. Pero soy un mortal y a veces las tentaciones me acarician y al salir de mi dieta llegan los avisos de que no puedo bajar la guardia. Decía mi médico: de vez en cuando date un gustico, pero no exageres. Hoy en día el gustico está en cuidarme.

La curación es un proceso en el que te conectas con tu cuerpo, lo escuchas, lo consientes. Es una conexión mente cuerpo. Eso lo aprendí de mamá, quien nos dio un magnífico ejemplo de valentía y amor por la vida. Fue diagnosticada de cáncer y le dieron de vida un par de meses. Pues la chica vivió ocho años. Su poder mental, la práctica de la meditación y el apoyo de todos la hicieron un ser fuerte. Se enteró de que no estaba sana, pero supo tener su cuerpo curado por el tiempo que nadie imagino.

El estar sano como estar curado implican responsabilidad. Somos nosotros, quienes debemos tomar las riendas de nuestro bienestar. Debemos prevenir y para ello debemos adoptar hábitos saludables. También debemos estar atentos a las señales de nuestro cuerpo, y buscar atención médica profesional cuando sea necesario. Nunca en una página de internet o un curandero recomendado por el compadre.

Cuando logramos recuperar la salud después de una enfermedad, debemos mantener un enfoque proactivo para preservar ese estado de bienestar. Ese enfoque debe implicar cambios en nuestros hábitos, en nuestra forma de pensar. Puede ser un proceso desafiante, pero también una oportunidad para aprender a tomar conciencia sobre nuestra propia vida.

Estar sano y curado, no debe ser un viaje en solitario. La empatía, el apoyo de quienes nos rodean pueden hacer una gran diferencia en nuestro proceso de recuperación, en nuestra capacidad para mantener un estado de salud óptimo.

Los conceptos de Sano y Curado no son sinónimos. Lo sano representa armonía, la curación implica la restauración de esa armonía. Debemos estar atentos a ambos procesos. Estar conscientes de ello nos dará como consecuencia el bienestar deseado y la capacidad de una mejor vida.

Con lo escrito anteriormente, estoy expresando lo que entiendo por salud y la curación. Tal vez físicamente no soy sano por herencia, pero mi mente, mi espíritu gozan de una salud excepcional, tanto es así que me han ayudado para poder tener mi cuerpo en curación constante. Mi amor por la vida y el amor que mi familia me brinda han sido fundamentales en el proceso.

Todos los Derechos Reservados. © Copyright 2024 Germán Andrade G.

Contenido original escrito para:
¿Estar sano y estar curado? por @rosahidalgo.

Imágenes propias editadas usando CANVA.

El GIF al final de la publicación fue creado usando CANVA.

Es mi responsabilidad compartir con ustedes que, como hispanohablante, he tenido que recurrir al traductor Deepl para poder llevar mi contenido original en español al idioma inglés. También, hago constar que he utilizado la herramienta de revisión gramatical Grammarly.

English

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I have always looked for ways to keep myself in good physical, mental, and spiritual shape. I am heir to a chronic disease, hypertension. This has led me to be aware that my habits and attitudes must be very different from the common being. I must put more effort into my health.

If being healthy is a harmony in which all the functions of the body and mind work like the machinery of a clock. I have a damaged watch and I cannot change the machinery. Then I must constantly heal myself. I must control the disease and for that, I must have healthy habits like eating right, exercising, and getting rid of stress.

I found out I was hypertensive when I was 40 years old. I knew my father was hypertensive, but I was in total denial that I could have inherited the disease. As it turned out, I was awarded and of the six siblings, I was the only one with hypertension. I clearly remember Luis Colmenares, the cardiologist: from now on, your life must change significantly if you want to live or if you do not want to be bedridden.

His words frightened me, I felt it was death in life. But as the days went by, I assumed my responsibility and changed my way of life. From being a heavy drinker, I became sober as I watched my friends destroy themselves. Quite a spectacle. From being a taster of fats, junk food, and so on, I became someone who delights in a steamed fish with vegetables or a grilled chicken.

I was crowned the king of the bathroom because of how many times I go to urinate due to the large amounts of water I drink. Salt or artificial seasonings disappeared from my meals. Now, lemon is my best friend. I have reduced stress and worries to a minimum. I was close to being a Tibetan monk, but I didn't have to exaggerate. I was not a healthy being, but I could be a cured man and for that, I made a great effort.

I have assumed great responsibility for my lack of health. I have not let anything else affect me. To achieve this, my intention alone was not enough; the family has helped a lot by being understanding, and empathetic. So much so that they all adopted my new habits. We are all in a constant healing process, we take care of our temple; the body.

Seeing the attitude of my family and the support of friends has immersed me in optimal mental health. That mind-body relationship keeps me in balance and keeps me from thinking that I am chronically ill. This helps me on the journey of life and helps me adapt to changes, and everyday challenges. It makes me feel energized so I can fulfill my responsibilities and enjoy the joys of existence. As a consequence, I am an exporter of love.

I am grateful to my heavenly father, because when I found out about my lack of health, I did not resort to depression, but I listened to that angel who was my cardiologist and decided to live in a constant state of healing. But I am a mortal and sometimes temptations caress me and when I go off my diet warnings come that I cannot let my guard down. My doctor used to say: once in a while treat yourself, but don't overdo it. Nowadays the pleasure is in taking care of myself.

Healing is a process in which you connect with your body, you listen to it, you pamper it. It is a mind-body connection. I learned that from Mom, who gave us a magnificent example of courage and love for life. She was diagnosed with cancer and was given a couple of months to live. The girl lived for eight years. Her mental power, the practice of meditation, and the support of everyone made her a strong being. She learned that she was not healthy, but she knew how to have her body healed for as long as anyone could have imagined.

Being healthy as well as being healed implies responsibility. We are the ones who must take the reins of our well-being. We must prevent and for that, we must adopt healthy habits. We must also be attentive to our body's signals, and seek professional medical attention when necessary. Never on an internet page or a healer recommended by the compadre.

When we manage to regain our health after an illness, we must maintain a proactive approach to preserving that state of wellness. That approach must involve changes in our habits, in our way of thinking. It can be a challenging process, but also an opportunity to learn to become aware of our own life.

Being healthy and healed should not be a solitary journey. Empathy and support from those around us can make a big difference in our recovery process and in our ability to maintain a state of optimal health.

The concepts of health and Healing are not synonymous. Healthy represents harmony, and healing implies the restoration of that harmony. We must be attentive to both processes. Being aware of them will result in the desired well-being and the capacity for a better life.

With what I have written above, I am expressing what I understand about health and healing. Maybe physically I am not healthy by inheritance, but my mind and my spirit enjoy exceptional health, so much so that they have helped me to have my body in constant healing. My love for life and the love that my family gives me has been fundamental in the process.

All rights reserved. © Copyright 2024 Germán Andrade G.

The original content was written for:
Being healthy and being cured? by @rosahidalgo.

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It is my responsibility to share with you that, as a Spanish speaker, I have had to resort to the translator Deepl to translate my original Spanish content into English. I also state that I have used the grammar-checking tool Grammarly.

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Hola @germanandradeg definitivamente la familia es pilar fundamental para motivarnos a estar sanos y curados, me encanta tu contenido, gracias por compartir. Un abrazo.

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Muchas gracias su majestad por tan motivador comentario.
Le saludo su súbdito desde las alturas, casi dándole la mano a Dios.

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