Saludos a todos los miembros de la comunidad, ¿cómo están? La sorpresiva derrota del Arsenal ante el Everton me dejó sintiéndome positiva respecto al partido del Manchester United contra el Crystal Palace porque indudablemente suponía una oportunidad de que la distancia aunque el número de partidos jugados esté algo disparejo, resulta importante que los dirigidos por Mikel Arteta no sigan sumando esos puntos que están funcionando como una suerte de colchón de seguridad para mantenerse en la cima. No me atrevería a decir que esto impactó en la actitud que mostraron los Diablos Rojos en un inicio, desde la llegada de Erik ten Hag como técnico del equipo estamos viendo una postura con más energía en los primeros minutos. De cualquier manera nada me preparó para lo que sería el segundo tiempo del encuentro con el gran desastre que se armó como consecuencia de malas decisiones.

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Las pesadillas no tardaban en llegar para el equipo visitante cuando una mano dentro del área por parte del centrocampista Will Hughes le dio la posibilidad de cobrar un penal al Manchester United después de ser revisada la jugada por el árbitro. Para mí fue tan clara que no creí que tuviese que ser revisada por el propio árbitro en el monitor, al menos no necesitó ver la repetición más de dos veces para decretar el penal a favor de los locales. No solamente el jugador del Crystal Palace se equivocó al separar tanto aquel brazo del cuerpo al momento del remate de Marcus Rashford, sino también en su reacción cuando la pelota impacta su mano… cuando la mayoría de los jugadores rivales están pidiendo un penal al árbitro porque supuestamente hubo mano de tu parte, al menos intenta negar que eso pasó así no sea cierto, algo que hizo pero luego de que el árbitro dijera que hubo mano y cobrara el penal.

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Cobrando el penal como todo el profesional que es, Bruno Fernandes abrió el marcador, dándole la delantera a un Manchester United que aprovechaba la poca efectividad en la marca de sus rivales para sacar al máximo su fluidez, esto debido a que simplemente no los iban a buscarlos en un intento de recuperar la esférica con la presión suficiente, hubo momentos en donde se limitaban a ocupar los espacios mirando como los Diablos Rojos movían la pelota, no reaccionaban. El trabajo colectivo de generación de juego por parte de los dirigidos por Erik ten Hag estuvo en su punto, sobre todo en el mediocampo pues Casemiro y Fred manejaron a la perfección los hilos con ambos participando en ataque activamente. En lo personal destaco el trabajo de Fred porque suelo ser muy crítica con su desempeño en la cancha de juego, he llegado incluso a decir que no merecía estar en el equipo, pero deben reconocerse los errores admitiendo que estuvo magnífico.

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En el segundo tiempo comenzaron los problemas, el Crystal Palace entrando dispuestos a luchar por conseguir el empate mientras los Diablos Rojos se desdibujaban respecto a su faceta ofensiva, en donde los tiros de peligro hacia la arquería rival fueron muy pocos pero no inexistentes. En una jugada específica de juego colectivo donde rodearon el área rival, se juntaron Alejandro Garnacho, Luke Shaw y Marcus Rashford para agrandar la ventaja a dos goles en un pequeño destello de efectividad que no fue reflejo de cómo se encontraba la dinámica del encuentro. Debe resaltarse que Alejandro Garnacho entró en sustitución por Wout Weghorst que en verdad no había tenido jugadas que favorecieran su posición, el resultado apareció minutos después, con Marcus Rashford empujando la esférica dentro del arco defendido por Vicente Guaita al ganar la posición entre la línea defensiva que ni lo molestó.

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Las pesadillas también llegarían para el Manchester United ante una pelea que se formó entre ambos equipos después que Anthony fuera tirado al foso por Jeffrey Schlupp, una mala reacción del brasileño como consecuencia de esta acción. Lo que sucedió después me molesta porque no había necesidad de que se formara tanto problema, los empujones y agarrones fueron algo que se pudo haber evitado de no ser porque Anthony actuó con la cabeza caliente, pero tampoco se le puede quitar responsabilidad a Casemiro porque menos necesidad había de agarrar a Will Hughes por el cuello con ambas manos. Como fue una conducta violenta, se revisó la acción y terminaron sacándole una tarjeta roja a Casemiro, dejando al equipo con un jugador menos en uno de sus peores momentos ya que no estaban jugando para nada bien, dependiendo de varias jugadas defensivas de Lisandro Martínez para salir de mucho peligro.

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La salida de Casemiro rompió el partido para los Diablos Rojos, generándose momentos de descontrol en donde lo único que le impedía al Crystal Palace marcar los goles que le quitarían la victoria a sus rivales era precisamente una defensa en su mayoría efectiva, pero no lo suficiente como para que el arco defendido por David De Gea se salvara. Los esfuerzos del español se hicieron notar cuando después de un tiro de esquina evitara que la esférica entrara en una clara jugada de gol para el descuento. Sin embargo, un nuevo tiro de esquina se presentó por esta salvada y de allí llegaría el primer gol de los rivales, haciendo que los últimos minutos del encuentro se convirtieran en una lucha constante llena de tensión. Honestamente, creo que haber terminado ganando es en gran parte por la defensa de Lisandro Martínez porque fue quien evitó muchas jugadas de peligro, sin querer menospreciar el trabajo de los demás, pero para mí se destacó.

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Sí, el encuentro se ganó, pero esto no puede ocurrir. Es evidente que si la intención será salir con energía a buscar la victoria desde el pitazo inicial el equipo necesita mostrar un mayor nivel de efectividad porque de lo contrario los jugadores se están desgastando sin necesidad, aumentando las probabilidades de que a medida de que vayan perdiendo esa energía sean incapaces de afrontar al equipo rival cuando este se plante bien. Durante el primer tiempo se presentaron muchas jugadas que podrían haber terminado en gol pero solamente fueron capaces de marcar el gol de penal, es algo inaceptable porque estando en la Premier League cualquier equipo así sea el que está de último en la tabla te puede marcar un gol que supondría el empate. Si la única jugada de peligro que se presentó en el segundo tiempo no hubiese terminado en gol, podría hasta haberse pedido el partido y no se sumaban puntos.

Mucho que mejorar todavía, pero disfrutando de la victoria.

Muchas gracias por leerme, espero que estén bien.

Las imágenes usadas tienen su respectiva fuente y fueron sacadas de Twitter.