Espíritu Santo del Valle de Guanaguanare
Caí rendido en un banco de la plaza principal de la ciudad (Plaza Bolívar), cansado de trajinar en trámites administrativos en una entidad del Estado que, se supone que están para prestar un servicio al ciudadano; funcionarios mal remunerados, llenos de rabias y frustraciones como el común de los empleados públicos; aunque, a diferencia de los honestos que nos ganamos la vida atendiendo al público con una sonrisa y sin pretensiones personales (también soy funcionario público), estos me habían puesto una y otra traba impidiéndome obtener los documentos, en espera de obtener un pago extra a cambio de celeridad y eficiencia, lo cual en Venezuela llamamos vulgarmente, matraqueo.
Era la cuarta vez que me dirigía a la capital del estado intentando legalizar unos documentos y cada vez era devuelto por cualquier detalle, teniendo que volver a pagar pasajes, comida, aranceles y timbres fiscales (estampillas), superando ampliamente lo que debía costar dicho trámite, todo por negarme a realizarles, lo que ellos llamaban “un modesto aporte de 30 verdes para ayudarme a hacer las cosas bien”. Lo que debía haber costado no más de 40$ ya iba por los 120.
La temperatura estaba quizá a unos 37 grados (es una ciudad bastante calurosa) pero estoy seguro de que la sensación térmica ese día rondaba los 40.
Habiendo logrado el objetivo me senté en una banca metálica recalentada por los rayos solares que se colaban entre los árboles; miré la imponente estatua de Bolívar en su caballo galopante y pensé en como en 193 años (y un poco más) el egoísmo e individualismos había ido matando los sueños de ese gran Libertador.
Enfoqué mi cámara para registrar el momento de mi pensamiento, y al fondo divisé la Catedral donde en 1821 entró Simón Bolívar a rezar antes seguir su camino hacia el Campo de Carabobo. Una suave brisa movía la copa de los árboles, esa misma brisa que debió sentir el Cacique Coromoto en 1651 cuando en esas mismas tierras se le apreció la Virgen María, marcando ese lugar como la “Capital espiritual de Venezuela” y hogar de nuestra Señora de Coromoto.
No podía regresar a mi ciudad sin antes recorrer la Plaza Bolívar, las calle empedradas de los alrededores, entrar a la Catedral y agradecer a Dios por las bendiciones en medio de las dificultades, y visitar la Plaza Coromoto.
La ciudad de Guanare, fundada en 1591 por el portugués Juan Fernández de León, bajo el nombre de “Espíritu Santo del Valle de Guanaguanare” es la capital del estado Portuguesa en Venezuela y tiene muchas locaciones de índole espiritual y cultural pendientes por visitar, más allá de los malos ratos pasados con funcionarios corruptos y negligentes.
Su gente amable y amistosa como el profe @jesuspsoto, oriundo de allí, me invita a visitar esa ciudad más seguido (dada la cercanía) para así deleitarme con sus parques, monumentos, iglesias y lugares históricos, y por qué no, tomarme un buen café con esa bella gente.
veac110124
Fuente de imágenes: Todas las fotos son de mi autoría.
Saludos @eliezerfloyd, espero que estés bien, comprendo esa experiencia que te toco vivir, también me ha tocado vivir ese proceso cuando tengo que hacer diligencias, es una de mucha paciencia. Gracias por mostrarnos este poseso y también por mostrarnos más de la ciudad.
El pan nuestro de cada día, tener que lidiar con alguien que se rebusca a expensas de las necesidades de los demás.
Me alegra que hayas conocido pequeños detalles de esa ciudad que alberga a la patrona de Venezuela: La Virgen de Coromoto.
Saludos @eliezerfloyd, espero que estés bien, comprendo esa experiencia que te toco vivir, también me ha tocado vivir ese proceso cuando tengo que hacer diligencias, es una de mucha paciencia. Gracias por mostrarnos este poseso y también por mostrarnos más de la ciudad.
Gracias por la visita y lectura.
Buenos días @eliezerfloyd, me encanta ver de nuevo una publicación tuya. Como me gusta la forma en las imágenes se van convirtiendo en una historia que yo desconozco, una historia en la que chocan la realidad con los sueños originarios. Un abrazo muy grande
Sí, luego de una pausa anímica y creativa, he regresado con este post mezcla de turismo religioso, historia y protesta por las insatisfacciones de la realidad actual con la que lidiamos diariamente.
Gracias por estar atento y activo con la lectura en este blog, y espero que hayas conocido una fracción de historia y geografia del estado (provincia) donde resido.
Saludos.
Si, he tomado alguna nota de su rica historia, me pareció muy interesante la mención al Libertador y el contraste de los anhelos de un pueblo y la realidad de lo cotidiano. Y, claro, muy bien escrito
Esta es la catarsis de muchos, pero nuestro corazón hace que veamos siempre un horizonte donde detalles como el cielo o la estatua del Libertador nos llena de fuerza para no decaer
Para todo lo demás existen los gozos de una buena empanadita jajaja, feliz día amigo, creo que leer tus líneas me acaba de ayudar...
No hay nada que los ojos de un romantico poeta no puedan transformar; pasando de la catarsis a la admiración de la belleza de la geografía e historia que nos rodea, y que nos muestra lo bella que es nuestra cultura y nuestra gente (a pesar de algunos malvivientes🤣).
Saludos bro.
Saludos amigo, pasando algo tarde jajaja, la poesía lleva la magia que todo lo hace bello y los malvivientes los sacamos a patadas jajajaja
Saludos poeta!! Espero estés muy bien!! Pronto nos estaremos leyendo!!
Todo un placer verte por acá, mi estimado profe. Espero pronto vuelvas al ruedo con tu excelente programa literario.
Saludos.
En eso andamos trabajando!!
Salud y buenas vibras
Yo disfrutando este gran post en donde emergen mis emociones al leerte. A veces estamos buscando algo más allá de nosotros mismos, sin darnos cuenta de que en un momento sencillo, en el acto cotidiano de vivir, surge la mejor historia. Y es esa la que cuenta, con la cual nos identificamos todos los que batallamos al sol. 😉
Para mi es sumamente placentero saber que disfrutas la lectura de mis historias, esas que, como dices, surgen de lo sencillo y lo cotidiano, transformando lo vulgar en extraordinario.
Gracias por la visita y valoración.
Momentos reflexivos guiados por la divinidad para acariciar con la suave brisa que refresca la calurosa tarde, en medio de la belleza histórica de la casa de la patrona; Virgen de Coromoto. Confiar como lo hizo el Libertador y el indio Coromoto, confirma el poder de hacer lo que nos proponemos por más difícil que parezca, confiar...
Me encantó la foto de la plaza Coromoto.
Estando en tierra de la Virgen de Coromoto, no podía ser de otra manera.
Gracias por tu grata visita.