More than 40 years ago, I became a collector of a weekly animated magazine of love stories, which today, many of those stories have been taken to the screen. It was the magazine Lágrimas, risas y amor, by Mexican writer Yolanda Vargas Dulché. I lost this collection because it deteriorated over time, but I have fond memories of her stories. Among these stories was one inspired by a bygone era, called Casandra.

The novel Casandra was taken to the screen with the same context but they called it Alondra. This work is based on a beautiful love story of the times where women wore long flared dresses full of flowers and lace, and beautiful flowered hats tight around their necks. They wore gloves and went out into the street with their lace parasols that matched their costumes.

I had not had the opportunity to see this story on the screen and now, that through the Mexican channel Telenovelas they are broadcasting it again, I have had the pleasure of enjoying each chapter and touring its landscapes and customs inspired by a very special past. This classic is aired at 2pm from Monday to Friday.

Alondra takes place in a glamorous era, where love was dressed up with gentlemanly gestures of gallant men who made girls fall in love with very formal and delicate phrases. Alondra, a beautiful girl who grew up in a wealthy family, lost her mother at a very young age due to a terminal illness.Her father, an elegant and handsome gentleman, who loved her dearly, vowed to live only for her and take care of her until she became a woman and formed her own home.

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Alondra and Carlos - Courtesy of Diez Minutos // Alondra y Carlos – Cortesía de Diez minutos

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But the girl's life as she grew up took many unexpected turns. Her aunt, a wicked widow, came to live in her house with her two children; her cousin, a tender and insecure girl, and her cousin, a hateful and malicious boy.Alondra's father traveled constantly on business and the girl was left in the care of her aunt.Time passed and both cousins became beautiful women full of illusions and dreams. Maria Elisa, oppressed by her mother who was manipulative and ambitious, was about to be married to an old millionaire, and Alondra, sweet and mischievous, a free soul like her name, met love in an adventure from her home to her father's hacienda, when her aunt denied her entrance to her own home.

Thus, her first love came into her life, but when she learned that Bruno was a married man, that feeling was invaded by doubts and prejudices that overshadowed the sweetness of her love. In the midst of a difficult situation, the cousins fled to the city far from the mistreatment of their aunt and cousin. There Alondra met true love, the one that brings strength and security, and takes her through life holding her hand without letting her take flight and run away again. Because it was no longer necessary, she knew she had found a nest full of love, and from then on, she had nothing to fear.

Each moment of this story was narrated by its protagonist through a diary in which she recorded her adventures.Alondra, the woman, was represented by actress Ana Colchero, and Carlos was represented by actor Ernesto Laguardia.The voice narrating the story through the writings of the diary was represented by actress Diana Bracho. And the other male figure in Alondra's life was represented by Gonzalo Vega.

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Alondra - Courtesy of Fans of Telenovelas // Alondra – Cortesía de Fans de Telenovelas

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Hace más de 40 años, me convertí en coleccionista de una revista animada semanal de historias de amor, que hoy en día, muchas de esas historias, han sido llevadas a la pantalla. Se trataba de la revista Lágrimas, risas y amor, de la escritora mexicana Yolanda Vargas Dulché. Esta colección la perdí porque con el tiempo se deterioró, pero guardo gratos recuerdos de sus relatos. Entre estas historias hubo una inspirada en una época antaña, que se llamaba Casandra.

La novela Casandra fue llevada a la pantalla con el mismo contexto pero la llamaron Alondra. Esta obra está basada en una hermosa historia de amor de los tiempos donde las mujeres llevaban largos vestidos acampanados y llenos de flores y encajes, y hermosos sombreros de flores ajustados a su cuello. Usaban guantes y salían a la calle con sus sombrillas de encajes que combinaban con sus trajes.

No había tenido la oportunidad de ver esta historia en la pantalla y ahora, que a través del canal mexicano Telenovelas la están transmitiendo de nuevo, he tenido el placer de disfrutar cada capítulo y recorrer sus paisajes y costumbres inspirados en un pasado muy especial. Este clásico es transmitido a las 2pm de lunes a viernes.

Alondra se desarrolla en una época glamorosa, donde el amor era ataviado con gestos caballerosos de galantes hombres que enamoraban a las chicas con frases muy formales y delicadas. Alondra, una hermosa niña que creció bajo el seno de una familia acomodada, perdió a su madre siendo muy pequeña por una enfermedad terminal. Su padre, un elegante y apuesto caballero, quien la amaba muchísimo, juró vivir sólo para ella y atenderla hasta que se hiciera mujer y formara su propio hogar.

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Alondra and Carlos - Courtesy of Diez Minutos // Alondra y Carlos – Cortesía de Diez minutos

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Pero la vida de la chica a medida que fue creciendo dio muchos giros inesperados. Su tía, una malvada viuda, se fue a vivir a su casa con sus dos hijos; su prima, una niña tierna e insegura, y su primo, un niño odioso y malintencionado. El papá de Alondra viajaba constantemente por sus negocios y la niña quedó al cuidado de su tía. El tiempo pasó y ambas primas se convirtieron en hermosas mujeres llenas de ilusiones y sueños. María Elisa, oprimida por su madre que era manipuladora y ambiciosa, estuvo a punto de ser casada con un anciano millonario, y Alondra, dulce y traviesa, un alma libre como su nombre, conoció el amor en una aventura de su casa a la hacienda de su padre, cuando su tía le negó la entrada a su propio hogar.

Así, llegó a su vida el primer amor, pero cuando supo que Bruno era un hombre casado, aquel sentimiento se invadió de dudas y prejuicios que opacaron la dulzura de su amor. En medio de una difícil situación, las primas huyeron a la ciudad lejos del maltrato de la tía y el primo. Allí Alondra conoció el amor verdadero, el que brinda fortaleza y seguridad, y la lleva por la vida tomada de su mano sin dejar que alzara el vuelo y escapara nuevamente. Porque ya no era necesario, sabía que había encontrado un nido lleno de amor, y de ahí en adelante, nada debía temer.

Cada momento de esta historia, fue narrado por su protagonista a través de un diario donde iba plasmando sus aventuras. Alondra, la mujer, fue representada por la actriz Ana Colchero, y Carlos estuvo representado por el actor, Ernesto Laguardia. La voz que narraba la historia a través de las escrituras del diario, estuvo representada por la actriz Diana Bracho. Y la otra figura masculina en la vida de Alondra fue representada por Gonzalo Vega.