Pedir ayuda: una decisión que puede cambiar nuestro entorno

¡No está mal pedir ayuda!

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Esta será la frase que nos acompañará el resto de nuestras vidas, y no sé si muchos puedan sentirse identificados con esta realidad, pero, hay personas incluyéndome a los cuales se nos hace más fácil ayudar, apoyar o hacer un favor a otros que pedir ayuda cuando la necesitamos; puede que esta realidad se deba a la manera en que nos educaban nuestros padres, dicha educación es para tener como resultado personas no #dependientes de nadie, que por sobre todas las circunstancias sepa valerse por sí mismo, porque esta es la forma más sublime de hacer entender a los demás que tenemos #fuerza y #valentía.

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Es verdad que nos domina la mentalidad de #independencia, y ser dominante en todo ámbito habla de nosotros como: atentos, lideres natos, personas expansivas e incluso moldeables a cualquier situación que se le presente, una persona que sobre cualquier acontecimiento tome la iniciativa, ante todo e inclusive todos, el punto está, en ser un sujeto a lo que los llaman los viejo un ser "#perfecto”, alguien polifacético, por así decir, que no necesite de nadie para: cambiar un bombillo o un caucho, poner una bombona, reparar el grifo, reconstruir un cableado, colocar una teja, y mucho más.

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La búsqueda de nosotros como alguien útil, pocas veces nos hace ver la realidad que nos rodea, podemos ser útiles para nosotros y los demás, y el simple hecho de #pedir #ayuda no nos vuelve débiles, mucho menos unos #fracasados, en sí nos vuelve #intrépidos, #honestos, y #responsables, con nosotros y con los demás.
Pedir una mano amiga, no nos vuelve dependientes o inútiles, más bien es sacar fuerza y coraje de nuestra voluntad espiritual, es pisar fuerte y reconocer que se nos olvidó, o que se no sabemos cómo solucionar la interrogante que tenemos en frente, es entender que necesitamos del apoyo de un tercero, el problema no es necesitar de otro, sino el miedo o la incertidumbre que te rechacen, o que te juzguen, ser ridiculizados, o el simple hecho de pensar que no mereces ser ayudado, son parte de las cosas que tienden a ser limitantes a la hora de solicitar un apoyo, me imagino que ante lo anterior el principal #miedo de pedir ayuda se debe a que nos enfrentamos al cambio, pues no somos nosotros los que necesitan algo de alguien más.

El día viernes, salimos de casa para la ciudad de Cumaná, mi esposo, mi suegro, mi cuñada y yo, el viaje iba muy ameno y monótono como siempre, nada nuevo en la carretera, “#pensé”, llegamos a la ciudad y cuando al fin llegamos a la estación de servicios la palanca del carro se atascó, en un forcejeo y una mala caída en la cuneta, quedo floja la palanca del carro, y muchos dirán que no hay problema con eso, y el problema era que el carro es sincrónico, y en el ajuste no se quedaba en ninguna velocidad, como no se podía hacer el cambio, quedamos accidentados, gracias a #Dios en una zona residencial, mi suegro trato de verificar si podía solucionar el problema y tras varias horas, muchas personas pasaban. Preguntaban y nosotros en el mismo lugar, a la final y tragando en seco mi suegro llamó a su compadre pidiendo ayuda, le explicó la situación y como él tampoco sabía, se llegó al lugar donde estábamos accidentados con un mecánico, el cuento fue que la guaya selectora de velocidades.

La verdad era que estaba obtuso en pedir ayuda, pero cuando lo hizo, y vio a muchos ayudando a arreglar el carro, se sintió #apoyado, su estrés bajo, y de verdad que bajo porque lo poco que nosotros lo estábamos ayudando no era suficiente, y a veces no se comunicaba ni nos pedía ayuda si no que se metía debajo del carro, salía, abría el capó, verificaba el volante, la ansiedad y la tensión estaban a millón.
Esto nos enseñó, a todos los que estábamos junto al carro, incluyendo a los que estaban en la cola que, no nos la sabemos todas, que no somos Superman, que el primer paso y el más importante en varios casos es dar y no recibir, pero cuando se trata de ayuda, es vital pedir auxilio, saben a través de ello logramos resolver problemas que se nos hacían difícil solucionar.

Al pedir ayuda enfrentamos nuestros #miedos y #prejuicios, comprendemos que no somos perfectos, que no tiene nada malo pedir una segunda, una mano, no es pedir caridad, es entender que no podemos hacer ciertas cosas; no debemos sentir #vergüenza, gritar socorro, es aceptar que somos #capaces y responsables, pero, a veces no podemos con todo.

Muchas gracias por su lectura, me despido deseándoles feliz día éxitos en la vida.

#English

It's not wrong to ask for help!

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This will be the phrase that will accompany us for the rest of our lives, and I don't know if many can identify with this reality, but there are people including me who find it easier to help, support or do a favor for others than to ask for help. when we need it; This reality may be due to the way our parents educated us, this education is to result in people who are not dependent on anyone, who above all circumstances knows how to take care of themselves, because this is the most sublime form of make others understand that we have #strength and #bravery.

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It is true that the mentality of #independence dominates us, and being dominant in every area speaks of us as: attentive, born leaders, expansive people and even moldable to any situation that arises, a person who takes the initiative in any event, First of all and even everyone, the point is to be a subject, what the old people call a "#perfect" being, someone multifaceted, so to speak, who does not need anyone to: change a light bulb or a tire, put a cylinder, repair the faucet, rebuild wiring, install a tile, and much more.

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The search for ourselves as someone useful rarely makes us see the reality that surrounds us, we can be useful to ourselves and others, and the simple fact of asking for help does not make us weak, much less failures, in itself. It makes us #fearless, #honest, and #responsible, with ourselves and with others.

Asking for a helping hand does not make us dependent or useless, rather it is drawing strength and courage from our spiritual will, it is stepping firmly and recognizing that we forgot, or that we do not know how to solve the question in front of us, it is understanding. that we need the support of a third party, the problem is not needing another, but the fear or uncertainty of being rejected, or being judged, being ridiculed, or the simple fact of thinking that you do not deserve to be helped, are part of the things that tend to be limiting when it comes to requesting support, I imagine that given the above, the main #fear of asking for help is due to the fact that we are faced with change, since we are not the ones who need something from someone else.

On Friday, we left home for the city of Cumaná, my husband, my father-in-law, my sister-in-law and I, the trip was very pleasant and monotonous as always, nothing new on the road, "#I thought", we arrived at the city and When we finally arrived at the service station the car lever got stuck, in a struggle and a bad fall into the ditch, the car lever became loose, and many will say that there is no problem with that, and the problem was that the car is synchronous, and in the adjustment it did not stay in any speed, since the change could not be made, we were in an accident, thank God in a residential area, my father-in-law tried to verify if he could solve the problem and after several hours, many people passed by. They asked and we were in the same place, in the end and swallowing hard, my father-in-law called his friend asking for help, explained the situation to him and since he didn't know either, he arrived at the place where we were in an accident with a mechanic, the story was that the speed selector guide.

The truth was that he was obtuse about asking for help, but when he did, and saw many helping to fix the car, he felt supported, his stress went down, and it really did go down because the little that we were helping him was not enough, and sometimes he didn't communicate or ask us for help, but rather he got under the car, got out, opened the hood, checked the steering wheel, anxiety and tension were at a million.

This taught us, all of us who were next to the car, including those who were in line, that, we don't know it all, that we are not Superman, that the first step and the most important in several cases is to give and not receive. , but when it comes to help, it is vital to ask for help, you know through this we manage to solve problems that were difficult for us to solve.

When asking for help we face our fears and prejudices, we understand that we are not perfect, that there is nothing wrong with asking for a second, a hand, it is not asking for charity, it is understanding that we cannot do certain things; We should not feel ashamed, shout for help, it is accepting that we are #capable and responsible, but sometimes we can't do everything.

Thank you very much for reading, I say goodbye wishing you a happy day and success in life.