Adiós Ansiedad [ESP-ENG]

Cada ser humano ha experimentado situaciones de intranquilidad, a veces el estado que se posiciona del individuo, hace daño al equilibrio del organismo. Este fenómeno puede crear consecuencias negativas y el sujeto debe aprender a sobreponerse; es necesario comprender la situación para atender el padecimiento y evitar que ronden de nuevo la inestabilidad y saber cómo enfrentar futuras batallas. Fue así como me sentí reciente; hace 6 años padecí de un ataque de ansiedad producto de una exigencia propia que respondía a una presión social (preocupación), aprendí a identificar el padecimiento, los síntomas y las herramientas para atender el estado y gozar de salud nuevamente.

Cada vez que veo que se asoma la ansiedad, la enfrentó antes que me toque, es decir, ella me habla al oído o me roza la piel, pero aprendí a despedirla, a ignorarla porque el problema se solucionará. Sin embargo, la semana pasada recaí, la sensación fue y es fatal que el pecho duele, el estómago débil, el corazón galopaba, dificultad para respirar, dormir un lujo, sensibilidad y lo peor sentir un vacío que recorre todo el cuerpo. No recuerdo el momento que dejé abierta la puerta y la ansiedad se instaló en mi vida, cuando reacciono era tarde, no obstante, sabía qué hacer. Empecé a respirar, identificar el origen, crear afirmaciones positivas y retomar mis pastillas de la tiroides. Sé que es lenta la recuperación y también reconocí que perdía fuerza la ansiedad, pero no se marchaba, así que decidí terminar con la preocupación personal y social que hizo un estallido en mi vida.

La situación inofensiva paso a grave, la ansiedad se reía de mí y en las noches me repetía de nuevo juntas. Tomé la decisión que se marcharía pero cuando culminara mi objetivo; organicé los últimos detalles, al mismo tiempo hacía respiración diafragmática; aunque mis piernas se agitaban mientras hacía el trabajo, logré enfocarme. Pasé a la segunda fase que era esperar y después la última etapa de evaluación personal y social, busqué a toda costa sobresalir, tener los resultados a mi favor; entretanto, la ansiedad se sentía segura, pero le dije, tienes los días contados porque gané y tú no tendrás de donde alimentarte, fue entonces que la ansiedad poco a poco se desvanecía. El 5 de marzo, día de mi cumpleaños, empecé a dormir y no pensar en boluduces para castigarme, ya sea por responder a alguien o a la sociedad que demanda evaluar o medir al sujeto para decir si capaz o no.

Ahora duermo, continúo con la respiración, tomó mis pastillas, usó mis pensamientos reales, concretos y efectivos para mi día; la presión del pecho desapareció y sólo queda un corazón que busca galopar suave para ir al ritmo noble de mi vida. La salud emocional es importante y la sabotea el piloto cuando la inquietud, el miedo o amenaza de determinado evento se convierte en arma bélico. Estoy mejor, sigo con alguna sensación leve cómo cuando un río arrasó un camino y ahora este organismo sana para continuar y en compañía de mis seres queridos quienes saben cómo ayudarme.

Every human being has experienced situations of restlessness, sometimes the state that is positioned of the individual, damages the balance of the organism. This phenomenon can create negative consequences and the subject must learn to overcome it; it is necessary to understand the situation in order to deal with the condition and avoid instability and to know how to face future battles. This is how I felt recently; 6 years ago I suffered from an anxiety attack as a result of a self-demand that responded to social pressure (worry), I learned to identify the condition, the symptoms and the tools to address the state and enjoy health again.

Every time I see anxiety looming, I faced it before it touches me, that is, she speaks into my ear or rubs my skin, but I learned to dismiss it, to ignore it because the problem will be solved. However, last week I relapsed, the feeling was and is fatal that the chest hurts, weak stomach, heart galloped, difficulty breathing, sleep a luxury, sensitivity and the worst feeling an emptiness that runs through the whole body. I do not remember the moment I left the door open and anxiety settled in my life, when I reacted it was late, however, I knew what to do. I started breathing, identifying the source, creating positive affirmations and resuming my thyroid pills. I know that recovery is slow and I also recognized that the anxiety was losing strength, but it was not going away, so I decided to put an end to the personal and social worries that made an explosion in my life.

The harmless situation became serious, the anxiety laughed at me and in the evenings I repeated myself together again. I made the decision that I would leave, but only when I had completed my objective; I organized the last details, at the same time I did the diaphragmatic breathing; although my legs were shaking while I was doing the work, I managed to focus. I went into the second phase, which was to wait and then the last stage of personal and social evaluation, I sought at all costs to excel, to have the results in my favor; meanwhile, the anxiety felt safe, but I told him, your days are numbered because I won and you will have nowhere to feed, it was then that anxiety gradually faded. On March 5, my birthday, I started to sleep and not to think of boluduces to punish myself, either for answering to someone or to the society that demands to evaluate or measure the subject to say if he is capable or not.

Now I sleep, continue with my breathing, took my pills, used my real, concrete and effective thoughts for my day; the chest pressure disappeared and only a heart that seeks to gallop smoothly to go to the noble rhythm of my life remains. Emotional health is important and is sabotaged by the pilot when the anxiety, fear or the threat of a certain event becomes a weapon of war. I am better, I continue with some slight sensation as when a river swept a road and now this organism is healthy to continue and in the company of my loved ones who know how to help me.