Que suerte la mía

Me encanta mirarte después de hacerte el amor, tenerte cerquita y disfrutar de esa sonrisa tan coqueta, de esos ojitos tan preciosos y de esa boquita que se antoja besar a todas horas.

Me encanta abrazarte y preguntarte que fue lo que viste en mí, porque para ser sincero aún no me la creo que una persona común cómo yo tuviera tanta suerte en este loco universo para enamorar a una mujer como tú.

Me encanta que me incluyas en tus planes a futuro, me fascina estar presente en cada uno de tus días, de tus sueños, de tus suspiros, me gusta cuando sonríes, cuando pestañeas y cuando te preocupas por mí.

En verdad, que suerte tan bonita la mía, porque es un privilegio verte por las mañanas despeinada y sin maquillaje y aunque ya no tenga ojitos para nadie más me encanta que te pongas brava porque alguna chica más me sonrió.

En definitiva me gusta la idea de una vida a tu lado, de distender contigo la cama, de caminar a tu lado bajo las estrellas, de besarte esos lunares que llevas bien escondiditos y ojalá se me conceda el milagro de tomarte de la mano por el resto de mis días".